Esta mañana, el peso se apreciaba con fuerza gracias a la debilidad del dólar a lo largo del mercado Forex y un mayor apetito por riesgo por señales de un control de los problemas de deuda de la inmobiliaria china Evergrande. Además, nuestra divisa cayó por debajo del psicológico de $20.00 poco después de la publicación del reporte de inflación en México, pues los precios volvieron a acelerarse al inicio de este mes, lo que refuerza las expectativas del mercado de que el Banco de México decida continuar con el ciclo de alzas a la tasa de interés en su reunión de la próxima semana. Por lo tanto, hace unos momentos el peso ganaba 0.22% cotizando alrededor de $20.04.
En la primera quincena de septiembre, el Índice Nacional de Precios al Consumidor aumentó en 0.42% q/q, superando las estimaciones del consenso de analistas (0.28% q/q) y siendo la mayor variación para este periodo desde 2016. Esta aceleración fue impulsada, en gran medida, por el aumento de los precios de energéticos, como el gas L.P. (2.26% q/q) y gasolina de bajo octanaje (0.38% q/q), y productos agropecuarios, como el jitomate (11.94% q/q) y la cebolla (16.2% q/q). Además, los precios subyacentes siguen subiendo (0.31%), pues las mercancías aumentaron en general más de 0.4% q/q, debido a que los costos de insumos no han disminuido por la escasez y demoras en el suministro. En lo que respecta al subíndice no subyacente, sorprendió a los inversionistas con un alza del 0.76% q/q, tras una caída del 0.52% m/m en agosto. Pues, los mecanismos de control de precios al gas L.P. no han podido contener el alza en las referencias internacionales y este sigue siendo uno de los productos con mayor incidencia. Por lo tanto, la inflación general anual ascendió al 5.87%, mientras que la subyacente se ubicó en 4.92% y la no subyacente en 8.86%.
