Esta mañana, el peso opera con ganancias frente al dólar revirtiendo las pérdidas observadas durante la sesión overnight. La moneda mexicana mantuvo su tendencia descendente tras la publicación del reporte del Indicador Global de Actividad Económica (IGAE) del mes de mayo, que superó las proyecciones de los analistas. Desde el punto de vista técnico, el indicador RSI nos da señales de agotamiento en el movimiento bajista en el corto plazo, pues no ha logrado perforar el umbral de sobreventa. Hace unos momentos, nuestra moneda se apreciaba 0.14% cotizando debajo de $20.00.
De acuerdo con INEGI, el IGAE tuvo un crecimiento del 25.3% a/a en mayo, el cual está fuertemente sesgado por una muy baja base de comparación, dada por el punto más álgido de las medidas de confinamiento por la pandemia. En su comparación mensual, este indicador creció 0.6%, gracias a una sorpresiva expansión de las actividades primarias en 8.4% m/m.
Por su parte, las actividades secundarias crecieron solo 0.1% m/m, pues la industria manufacturera (-0.1% m/m) sigue luchando contra la escasez de insumos, como chips y semiconductores, y las demoras en las cadenas de suministro. En lo que respecta a los servicios, estos siguen beneficiándose de la apertura de la economía, por lo que tuvieron un crecimiento del 0.8% m/m, apoyados por la reactivación de la industria de la hospitalidad y servicios alimenticios que se expandieron en 5.4% m/m.
En suma, la economía mexicana logró hilar su tercer mes de crecimiento y continúan las señales de fortaleza en su trayectoria de recuperación durante el 2T-21. Por lo tanto, el consenso de analistas esperan que el PIB mexicano haya crecido 1.8% t/t y 19.8% a/a en ese periodo. Esta dato se confirmará con la primera estimación que INEGI publicará este viernes.
