- Con cifras reales, el Indicador General de Confianza pasó de 46.9 puntos a 47.2.
- La Confianza alcanzó su punto más alto en casi 5 años.
- La mayoría de los indicadores tuvieron pocos cambios respecto a noviembre.
El dinamismo podría extenderse por algunos meses
En México, la Confianza del Consumidor tuvo muy pocos cambios durante diciembre y sigue apoyando la noción de un sólido cierre de año para la actividad económica. Incluso, con cifras originales, el indicador general alcanzó un máximo de casi 5 años al posicionarse en 47.2 unidades y queda abierta la posibilidad de que el alza continúe debido a la actualización de los salarios mínimos y de los montos de las transferencias de los programas sociales. En el análisis ajustado por estacionalidad, los principales componentes no tuvieron grandes cambios, siendo lo más significativo una baja de 0.7 unidades en la valoración de las condiciones futuras para el país. Con todo, la Confianza cerró el que ha sido su mejor año en el registro histórico y la fortaleza presente, sobre todo en el segundo semestre, sigue siendo preludio del dinamismo del mercado interno, por lo que no descartamos sorpresas en las cifras finales de crecimiento.
Los principales indicadores tuvieron pocos cambios
Además del reporte principal, los indicadores complementarios validaron el patrón de pocos cambios, aunque la mayoría obtuvo resultados negativos. La excepción fue la categoría asociada a las probabilidades para construir, remodelar y comprar una vivienda, que tuvo una expansión de 2.6 puntos no vista con mucha frecuencia y es una sorpresiva noticia a la luz de los niveles récord en las tasas de interés. El movimiento podría estar asociado a la concentración de flujos de ingresos en la parte final del año y es un augurio positivo incluso para los segmentos que no están directamente conectados al sector de la construcción.
¿Qué esperar?
El dato de hoy se agrega a las señales que apuntan no solo a resiliencia, sino a renovado dinamismo para la economía en el cuarto trimestre de 2023. Junto con las señales positivas que han tenido otros indicadores no sería de extrañar que el PIB mantuviera el avance promedio acumulado durante el año de 0.9% trimestral, lo que dejaría a la economía en posición para lograr un alza de 3.7% en todo el año. Hacia adelante, hay razones para pensar que el optimismo se extenderá, pues el incremento de 20% para el salario mínimo dejará una estela sobre el consumo durante los próximos meses. En el acumulado, los salarios mínimos han aumentado 113% en los últimos 6 años y consideramos que ello supone un cambio estructural para la determinación del consumo, por lo que no descartamos que los distintos componentes de la Confianza se establezcan en territorios de nuevos máximos históricos.