Las acciones de Nike (NYSE:NKE) subieron cerca de un 5% el viernes pasado en reacción al reporte de ganancias de la compañía publicado el día anterior. El fabricante de ropa deportiva está siendo afectado negativamente por factores macroeconómicos, como la depreciación de diferentes divisas contra el dólar estadounidense, lo cual reduce sus ventas y ganancias en dólares. Sin embargo, la firma continúa demostrando su capacidad para generar una sólida performance, incluso operando en escenarios económicos adversos.
Las ventas totales de la empresa fueron de 7.500 millones de dólares, un crecimiento del 7% contra el mismo trimestre en el año anterior. El dato estuvo por debajo de las expectativas, ya que los analistas de Wall Street pronosticaban en promedio ventas por 7.630 millones para el periodo. No obstante, buena parte de la debilidad en el crecimiento se debió al impacto negativo del tipo de cambio, ya que las ventas expresadas en moneda constante crecieron un 13% contra el mismo trimestre del año anterior.
Las ventas de la marca fueron de 6.900 millones de dólares, con un incremento del 11% en moneda constante, gracias a una sólida performance en la mayoría de los mercados en los cuales opera la compañía. La marca Converse aportó ventas por 538 millones, y la tasa de crecimiento en este segmento fue especialmente positiva, con un aumento interanual de ventas del 33% en moneda constante.
Cuando se analizan las ventas de los últimos nueve meses ajustadas por el impacto cambiario, se observa una performance alentadora de Nike en diferentes mercados: las ventas en Norteamérica crecieron un 11%, Europa del Oeste reportó un incremento del 23%, Europa Central y del Este tuvo un crecimiento del 13%, mientras que los mercados emergentes crecieron en un 12% interanual.
Los datos provenientes de China resultan especialmente alentadores ya que Nike ha reestructurado el negocio en ese mercado clave durante los últimos trimestres, y la información del último período confirma que la firma se encuentra por el buen camino al respecto de los cambios en el gigante asiático. La facturación en este país aumentó un 18% en dólares y un 19% en moneda constante.
Un dato saliente es que Nike logró incrementar los márgenes de rentabilidad a pesar del impacto negativo de los tipos de cambio. El margen bruto sobre ventas se expandió en 140 puntos básicos, alcanzando un 45,9% sobre la facturación.
Esto se debe en buena medida al crecimiento de las ventas directas al consumidor, principalmente online. Este segmento generalmente opera con mayores niveles de rentabilidad. Además, los precios promedio en mercados internacionales suelen ser más elevados que en los EE.UU., y en la medida en que la firma gana terreno internacional, esto tiene un efecto positivo sobre los márgenes.
El aumento de rentabilidad por encima de las expectativas le permitió a la compañía superar las estimaciones de ganancias en el trimestre a pesar de que las ventas estuvieron por debajo de las estimaciones. La empresa reportó un potente crecimiento del 19% en las ganancias por acción, alcanzando los 0,89 dólares por unidad en el trimestre. Los analistas esperaban en promedio ganancias de 0,84 por papel.
En cuanto a pedidos de órdenes futuras, se observa claramente el impacto de la fortaleza del dólar, aunque el negocio sigue gozando de muy buena salud cuando se deja de lado este factor. Nike reportó un crecimiento del 2% en las órdenes futuras, aunque el dato se traduce en un aumento del 11% si se mide en moneda constante.
Por encima de los 100 dólares por acción, sus papeles marcan nuevos máximos históricos, lo cual deja un camino despejado de resistencias para subas adicionales. Más allá de eso, no sería de extrañar un descanso luego de las abruptas ganancias de las últimas semanas.
En cuanto a posibles soportes, la zona de 100 por unidad es claramente clave. Este nivel funcionó como resistencia de precios a principios de diciembre del año pasado. Además, se trata de un valor bastante representativo en términos simbólicos. En caso de quiebre por debajo de los 100 dólares, conviene seguir de cerca la línea de tendencia alcista que tuvo comienzos en junio de 2014, actualmente en cercanías de 95 por acción.
Si rompe a la baja ese soporte, podría esperarse una aceleración del ajuste, hacia 90,6 por unidad, zona que funcionó como un soporte importante durante el mes de febrero. Un quiebre bajista en estos niveles sería una señal fuertemente negativa, ya que podría habilitar caídas adicionales hacia niveles de 84 por unidad, zona de soporte de precios en el mes de octubre.
Las acciones de Nike cotizan a un ratio precio-ganancias de 25,5 veces los resultados estimados para el año próximo. Esta es una valuación demandante, considerablemente por encima del promedio del sector y reflejando la calidad de la compañía.
Tenemos un valor objetivo de 115 dólares por acción, y recomendamos la utilización de stop loss por debajo de los 90,5.