• El déficit público fue de $8.0 mmdp vs un superávit de $40.8 mmdp en 2020.
• La caída en los ingresos petroleros fue de 37.0% vs lo estimado en la Ley de Ingresos.
• El gasto neto cayó en 4.9% a/a y sigue limitado por la dinámica de la pandemia.
Las cifras de enero plantean un escenario riesgoso en el corto plazo
La Secretaría de Hacienda presentó los resultados de finanzas públicas del primer mes de 2021. El balance público tradicional fue deficitario por un monto de $8.0 miles de millones de pesos, mientras que el balance primario, que excluye los costos del financiamiento, fue superavitario por $51.7 mmdp. El año inicia con márgenes estrechos para las finanzas, pues ambas cifras presentan un deterioro notable frente a 2020. Destaca la fuerte caída de 12.0% anual en los ingresos presupuestarios, que es una de las peores en el registro histórico y, en parte, refleja el agotamiento de las fuentes de ingreso. Además, el gasto presupuestario también se ajustó a la baja (-4.9% a/a) evitando desequilibrios mayores, por lo que es probable que la debilidad del sector público siga limitando la recuperación de la demanda en el 1T-21.
La caída en los ingresos petroleros fue de 37.0% vs lo estimado en la Ley de Ingresos
En lo que se refiere a los ingresos, la caída fue tan pronunciada debido a la complicada base de comparación que representó enero de 2020, mes en el que la recaudación de ingresos tributarios se benefició por la menor cantidad de devoluciones y compensaciones. No obstante, respecto a la cifra proyectada en la Ley de Ingresos 2021, la cifra varió en -2.9%, principalmente debido a una desviación de -37.0% en los ingresos petroleros. Al respecto, la producción contemplada para el primer mes del año era de 1,935 miles de barriles diarios, pero el resultado fue de solo 1,649, lo que incluso implica una caída de 3.3% respecto a 2020.
El gasto neto cayó en 4.9% a/a y sigue limitado por la dinámica de la pandemia
Por el lado del gasto, se registró la cuarta contracción anual en los últimos 5 meses y la más profunda en los últimos 20. Uno de los pocos rubros con crecimiento significativo fue el de salud (+26.0% a/a, +8.9 mmdp), lo que refleja el reordenamiento y las limitaciones que la pandemia ha impuesto sobre las finanzas públicas, aunque la comparación anual se ve beneficiada por el subejercicio que dio en esta materia durante principios del año pasado. En contraparte, el gasto en Desarrollo Económico fue el que más se vio afectado, especialmente en los rubros de transporte (-76.9% a/a) y turismo (-67.2%).
Rumbo Económico
La evolución de las finanzas públicas será uno de los focos de atención para los inversionistas a lo largo de 2021, pues en el año se resentirán las presiones derivadas de una demanda interna más deprimida, así como de la merma en los fondos de estabilización. De esta manera, las cifras de enero plantean un escenario riesgoso en el corto plazo, sobre todo dado que en febrero y marzo los ingresos resentirán la aplicación de estímulos fiscales a los combustibles. Tras la publicación del reporte el peso se ha depreciado en 1.5% y cotiza en $20.93 frente al dólar.