Netflix (NASDAQ:NFLX) ha tenido un año especialmente volátil en 2016; luego de atravesar etapas de debilidad en los últimos meses, la acción de precios se muestra agresivamente alcista. El reporte de ganancias de la firma para el tercer trimestre del año superó ampliamente las expectativas, y las acciones acumulan una ganancia de más del 60% desde sus precios mínimos de los últimos 12 meses.
Analizamos los motivos detrás de esta performance tan atractiva y el potencial de Netflix en Bolsa hacia el futuro.
Despejando la incertidumbre
El principal dato positivo de Netflix en el tercer trimestre de 2016 fue que la compañía superó ampliamente las estimaciones de crecimiento: terminó el periodo con 86,7 millones de suscriptores en todo el mundo, superando las expectativas del management, que había anticipado 85,5 millones de suscriptores en el trimestre.
Tanto en los Estados Unidos como en el segmento internacional, los datos de expansión de la firma estuvieron por encima de las expectativas. La empresa ganó 0,4 millones de suscriptores nuevos en los EE.UU. contra un pronóstico de 0,3 millones, mientras que en mercados globales Netflix agregó 3,2 millones de suscriptores en comparación con los 2 millones de nuevos suscriptores anticipados por la compañía.
Una aceleración del crecimiento superando las expectativas es una buena noticia en sí misma, y el impacto sobre el precio de las acciones ha sido magnificado por el hecho de que Netflix había reportado datos decepcionantes de crecimiento en el segundo trimestre del año.
Teniendo esto en cuenta, su reporte de ganancias funcionó como un disparador de cambio sobre las expectativas al despejar las dudas de los inversionistas sobre la capacidad de crecimiento del negocio.
Los niveles de rentabilidad en los Estados Unidos se mostraron en aumento durante el período. Netflix reportó un margen de contribución de 36,4% en comparación con un 32,4% en el tercer trimestre de 2015. El equipo directivo de la firma estima que el margen de contribución debería alcanzar niveles del 40% sobre ventas en los Estados Unidos para el año 2020.
En cambio, la empresa está invirtiendo grandes sumas de dinero en mercados internacionales para financiar su expansión global. Esto implica erogaciones importantes en áreas como contenidos, márketing y tecnología, lo cual presiona sobre los niveles de rentabilidad. En este contexto, la compañía está perdiendo dinero en mercados internacionales, y probablemente la situación no va a cambiar a mediano plazo.
Riesgo y oportunidad
Netflix es un activo especialmente volátil, y es importante tener en cuenta que la firma probablemente seguirá generando flujos de caja negativos a mediano plazo. Su management espera que el negocio presente ganancias contables en el año próximo, aunque los flujos de caja seguirán bajo presión.
En la medida en que Netflix está cambiando de estrategia y apostando en forma creciente a la generación de contenidos propios, esto tiene un impacto negativo sobre los flujos de caja. La producción de títulos 100% propios, como Stranger Things, requiere grandes erogaciones de efectivo en la etapa de producción. En cambio, cuando Netflix apuesta a licencias de otras productoras, puede distribuir los costos de estas licencias a lo largo del tiempo.
Los contenidos originales son más rentables financieramente a largo plazo, además, le permiten a la empresa diferenciar su biblioteca de contenidos frente a otros jugadores en la industria de la TV online, lo cual es una ventaja competitiva central a la hora de capitalizar sus oportunidades de crecimiento.
Más allá de esto, a corto plazo, el negocio seguirá consumiendo cash, y la compañía anunció recientemente la emisión de títulos de deuda por 800 millones de dólares para financiar sus necesidades de efectivo. Dado que Netflix absorbe efectivo para funcionar, resulta complejo evaluar cuál sería una valuación razonable para un negocio que probablemente seguirá quemando efectivo a mediano plazo.
La firma es líder indiscutido en el negocio de TV online, y el último reporte de resultados de la compañía demuestra que su velocidad de crecimiento goza de muy buena salud. Por tal motivo, para inversionistas de alto crecimiento, Netflix es una alternativa excepcional a tener en cuenta.
Aclarado esto, el precio de las acciones se encuentra bastante caliente y en máximos históricos. Para un negocio con flujos de caja negativos, resulta complejo encontrar medidas de valuación que permitan justificar el precio del activo desde el punto de vista fundamental, por lo tanto, los papeles son claramente vulnerables a la baja en caso de que el negocio reporte datos decepcionantes a mediano plazo.
En conclusión, Netflix es el típico caso de una alternativa de inversión con alto potencial de crecimiento y con niveles de riesgo ampliamente por encima del promedio. A la hora de armar posiciones en un activo tan caliente, no conviene comprar una posición completa a los precios actuales, sino que parece mejor idea tomar posiciones parciales ante posibles ajustes de precio a mediano plazo.