La Bolsa de Valores de Tokio rompió este miércoles su racha de seis días con pérdidas al repuntar 2.88%, mientras en China la Bolsa de Shanghai cerró con caída de 2.42% y dejó atrás la barrera de las 3,000 unidades.
El índice Nikkei cerró al alza por primera vez en el año impulsado por el mercado estadunidense y aliviando las preocupaciones por la desaceleración de China.
Los datos de importación y exportación de China mejor de lo esperado para diciembre también impulsaron la confianza de los inversionistas, dijo Chihiro Ota, director general de la investigación de inversiones de SMBC Nikko Securities Inc.
El principal indicador tokiota, el Nikkei de 225 acciones, ganó 496.67 puntos (2.88%), al ubicarse en 17,715.63 unidades.
En tanto, el índice general de la Bolsa de Shanghai, el principal indicador de los mercados chinos, cerró con caída de 2.42%, tras perder 73.26 puntos y ubicarse en 2,949,6 puntos.
Pese a este revés bursátil, los analistas destacan la calma que otorga tanto la mayor estabilidad del yuan como la mejora en los datos de exportaciones.
Las ventas de China al exterior bajaron 1.4% en diciembre, cifra que mejora tanto el 6.8% de caída de noviembre como el ocho por ciento de descenso que esperaban algunos analistas.
El comercio exterior chino se contrajo 7% en 2015 por la caída de 13.2% de las importaciones, según las cifras en yuanes reveladas el miércoles por las aduanas chinas, que reflejan el estancamiento de la segunda economía mundial.