Es difícil pronosticarlo. A pesar de los aumentos de las tasas de interés, el crecimiento económico y laboral en Estados Unidos se mantiene; los consumidores muestran mayor confianza y siguen gastando, las empresas continúan creando empleos y fortaleciendo el mercado laboral, mientras que la tasa de desempleo registra niveles relativamente bajos.
Por otra parte, aunque la inflación general se encuentra en su nivel más bajo en dos años, el indicador subyacente no cede al ritmo necesario y la economía de Estados Unidos crece a una velocidad que complica llevar al indicador a la meta del 2%.
Este verano, la Oficina de Asuntos Presupuestarios del Congreso destacó que en lo que va del año algunos indicadores económicos han sido mejor que lo proyectado, aunque ciertos sectores podrían registrar una desaceleración en 2024. La agencia pronostica más aumentos en la tasa de interés para 2023, junto con una moderación en el crecimiento del PIB. La CBO se muestra optimista y confía en que la economía estadounidense será lo suficientemente fuerte para evitar la recesión.
Es complicado pronosticar la ruta que llevará la economía de Estados Unidos; los pronósticos siguen encontrados, hay quienes apuestan sólo a una desaceleración económica y otros mantienen su proyección para una posible recesión, lo que cumpliría la previsión que la FED hizo en mayo pasado: recesión para el último trimestre de este año y el primero del 2024.
Analistas de Citi pronostican recesión el próximo año; se basan en distintos episodios desde 1965 asociados a recesiones, y la corrección de la elevada inflación y fortaleza de los mercados laborales que exigió un notable aumento de la tasa de desempleo.
Todos quieren evitar que se cumpla este pronóstico; se estarán revisando las próximas cifras económicas, incluyendo la evolución de la inflación en las siguientes semanas y las decisiones de política monetaria.
Después del alza a la tasa de referencia en el mes de julio pasado, la 11ª en 17 meses, a 5.50% (el nivel más alto en 22 años), la pregunta de muchos es si habrá otro incremento en las reuniones de política monetaria que restan en el año.
Para muchos analistas, la FED cuenta con razones suficientes para implementar más incrementos, lo que aumentaría el riesgo de recesión.
Recordemos que durante la última reunión en Jackson Hole, el presidente de la Reserva Federal Jerome Powell, advirtió que la fortaleza de la economía estadounidense podría requerir nuevas alzas a los tipos.
“Estamos dispuestos a seguir aumentando las tasas si conviene, y mantener el nivel restrictivo hasta tener la certeza de que la inflación baja de manera sustentable hacia nuestro objetivo”, comentó Powell.
@LuceroAlvarezO