Las dificultades de crecimiento de varias regiones mundiales (excluyendo la economía de Estados Unidos) sigue haciendo mella en los mercados. La peor noticia hoy viene de Alemania, donde la producción industrial se hundió un 4.0% en agosto, mucho peor que la caída de 1.5% que estimaban los analistas. Este derrumbe mensual de la producción industrial germana es el peor desde la recesión de 2009 y se une al mal dato de pedidos de fábrica, lo que hace pensar que la economía alemana puede estar cerca de la recesión. En Inglaterra, la producción manufacturera aumentó un 0.1% comparado con 0.3% en el mes previo. En Japón, el banco central no hizo nada pese a las señales de desaceleración y la debilidad del yen, en mínimo de seis años. En Rusia, y ante el estancamiento de la economía y la depreciación del rublo, el banco central tuvo que intervenir por segundo día para detener su caída. En España saltó el primer caso de ébola fuera de África. Y en la guerra contra el Estado Islámico, los yihadista están cerca de tomar la ciudad kurda de Kobani en Siria. Ése es el panorama general.
En consecuencia, las bolsas globales descienden, y en ese mismo tono se mueve Wall Street en la apertura. En el momento de escribir esta nota, el Dow Jones pierde un 0.5%, el Nasdaq un 0.7% y el S&P’s 500 un 0.6%.
En Europa, la sesión es aún más fea. El caso de la enfermera contagiada de ébola en Madrid hace que el Ibex-35 de Madrid se hunda un 1.5%, pese a que el FMI ha dicho que España será en el 2015 la mejor economía de la eurozona. La bolsa de Milán cae un 1.0%, el Cac-40 de París un 1.1% y el Dax de Francfort un 0.5%. Fuera de la eurozona, el Ftse-100 retrocede un 0.4%. En las divisas, el euro se deprecia un 0.1% a 1.265 dólares por euro.
En las noticias corporativas, Hewlett-Packard Co (NYSE:HPQ) confirmó que se dividirá en dos, lo que implicará el despido de 55,000 trabajadores. Por otro lado, la minera brasileña Rio Tinto, rechazó una fusión con una rival de menor tamaño, Glencore Plc para crear un gigante minero de 160,000 millones de dólares. El exceso de oferta de mineral de hierro, el principal producto de Rio Tinto, ha provocado que el precio haya descendido a mínimos de 5 años.
Pero lo que afecta a los mercados mundiales es la percepción de que la economía está entrando en otro bache, con la salvedad de Estados Unidos. A eso hay que sumar el declive de los precios de las materias primas y las dificultades que está implicando en algunos países emergentes, así como las tensiones geopolíticas.