Por Laura Sánchez
Investing.com - Europa sigue inmersa en una crisis energética con altos precios del petróleo y del gas natural. Los expertos han analizado el compromiso de Vladimir Putin, presidente de Rusia, de esta semana de suministrar más gas a Europa para intentar controlar los precios de esta materia prima.
Según publica CNBC, los analistas creen que Putin tiene intención de presionar a Alemania para que autorice la utilización del gasoducto Nord Stream 2 (que llevará el suministro de gas ruso a Alemania a través del Mar Báltico), pero este proceso podría tardar meses, según los expertos.
Incluso, algunos dicen que Rusia no cumplirá su promesa. "Actualmente, el mercado nacional de gas ruso sigue siendo ajustado, con inventarios bajos, la producción ya está cerca de su pico y el invierno se avecina también en Rusia, lo que limita la capacidad de exportación de gas", explica Adeline Van Houtte, analista para Europa de Economist Intelligence Unit, en declaraciones recogidas por CNBC.
Gazprom (MCX:GAZP), el monopolio ruso del gasoducto de exportación, abastece actualmente el 35% de las necesidades europeas de gas.
Norbert Rücker, Head Economics and Next (LON:NXT) Generation Research del banco suizo Julius Baer (SIX:BAER), destaca que “el meteórico aumento de los precios del gas natural plantea interrogantes. Por supuesto, el fuerte aumento es la forma que tiene el mercado de hacer cumplir el racionamiento de la demanda e incentivar la oferta para reequilibrar los fundamentos. Sin embargo, mirando el complejo energético, y el gas natural europeo en particular, la ferocidad de los mercados parece incluir una buena parte de los excesos de sentimiento”.
“También estamos vigilando de cerca la minería de carbón de China, los flujos de gas de Rusia y las exportaciones mundiales de carbón, que consideramos como mecanismos de mercado de autocuración que se han puesto en marcha por razones económicas o políticas”, añade este experto.
“A los niveles de precios actuales, consideramos que los riesgos tienen un precio desproporcionado. Además del comodín del clima, los riesgos clave incluyen la política, que desafortunadamente tiene un historial de alimentar en lugar de aliviar las turbulencias del mercado a corto plazo”, sentencia Rücker.