Por Laura Sánchez
Investing.com - “No luches contra la Reserva Federal y tampoco luches contra la OPEP+”. Es una de las conclusiones del último informe de Bank of America (NYSE:BAC) sobre las expectativas del mercado del petróleo, tras los últimos acontecimientos que han tenido lugar, como el recorte de producción anunciado hace unos días por la OPEP+.
El responsable de materias primas de BofA, Francisco Blanch, explica que la entidad es “constructiva” respecto al precio del petróleo y ve la cotización del barril de Brent, el crudo de referencia en Europa, en un nivel de 88 dólares para 2023.
Blanch considera que la estrategia de la OPEP+ para soportar los precios podría funcionar: “Los indicadores macro no sugieren una desaceleración inminente y la demanda de los servicios sensibles a los precios (como el combustible de aviación y la gasolina) debería verse respaldada por la reapertura de China y la solidez de los mercados laborales occidentales (…) Y lo que es más importante, en un mundo de escasez de suministros físicos y amplia demanda de los consumidores, la elasticidad de los precios de la producción de esquisto estadounidense ha caído bruscamente, situando de nuevo a la OPEP+ en el centro de la formación de los precios del petróleo”, señala este experto.
En opinión de Blanch, hay 3 implicaciones clave en los precios de los recortes de la OPEP+.
En primer lugar, es probable que los precios del Brent promedien entre 10 y 15 dólares por barril por encima de los futuros de 81 dólares por barril durante los próximos 12 meses.
En segundo lugar, es probable que la estructura de plazos del petróleo se mantenga.
En tercer lugar, es probable que los diferenciales del crudo se reduzcan, lo que perjudicará los márgenes de refinación globales y devolverá valor a los productores.
“Anteriormente, esperábamos un pequeño superávit del mercado petrolero de 200.000 barriles diarios en 2023, pero ahora vemos un déficit de 400.000 b/d después de los recortes y la crisis bancaria”, señala Blanch.
“Con los inventarios ahora a punto de caer, la volatilidad del Brent debería disminuir, lo que ayudaría a anclar las expectativas del precio del petróleo. Sin embargo, los recortes físicos del petróleo crudo de la OPEP+ chocarán con los aumentos monetarios del banco central diseñados para frenar la demanda, lo que plantea riesgos macroeconómicos”, concluye.