Las entradas netas de inversión extranjera directa en Arabia Saudí experimentaron un aumento del 5,6% en el primer trimestre de 2024, alcanzando los 9.500 millones de riyales (2.530 millones de dólares). Los datos, publicados el domingo, indican una trayectoria positiva para el clima inversor del reino.
En comparación con el mismo periodo del año anterior, las entradas registraron un ligero aumento del 0,6%, ascendiendo a 17.000 millones de riyales. Mientras tanto, las salidas experimentaron una reducción del 5,1%, totalizando aproximadamente 7.500 millones de riyales.
El aumento de la IED forma parte de la estrategia económica más amplia de Arabia Saudí, encabezada por el príncipe heredero Mohammed bin Salman, para diversificar la economía de la nación y reducir su dependencia de las exportaciones de crudo. El reino se ha fijado el ambicioso objetivo de atraer 100.000 millones de dólares en IED de aquí a 2030 para reforzar su producto interior bruto no petrolero.
Una contribución significativa a las cifras de IED fue la reciente venta secundaria de acciones por valor de 11.200 millones de dólares de Saudi Aramco (TADAWUL:2222), la compañía petrolera nacional, que vio cómo más de la mitad de sus acciones eran adquiridas por inversores extranjeros a principios de este mes.
A pesar de estos éxitos recientes, la IED de Arabia Saudí aún no ha alcanzado el objetivo de 2030. El máximo se alcanzó en 2022 con 32.800 millones de dólares, seguido de un descenso a 19.200 millones en el año siguiente. Las cifras actuales representan un paso hacia el plan de diversificación económica del príncipe heredero, ya que el reino sigue buscando una mayor inversión extranjera.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.