El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha aprobado un desembolso de 2.200 millones de dólares a Ucrania, destinado a apoyar el presupuesto del país, que sigue afrontando retos económicos exacerbados por el conflicto en curso. Esta decisión, anunciada hoy, marca la cuarta revisión del Servicio Ampliado del Fondo, un programa de cuatro años iniciado en marzo de 2023.
Con este último desembolso, Ucrania ha recibido ya 7.600 millones de dólares del paquete de 15.600 millones diseñado para reforzar su economía. El FMI destacó el firme cumplimiento por parte de Ucrania de los requisitos del programa, alcanzando los objetivos cuantitativos y aplicando los puntos de referencia estructurales dentro de los plazos acordados o con retrasos mínimos.
A pesar de que la economía ucraniana ha mostrado unos sólidos resultados en el primer trimestre de 2024, las previsiones para el segundo semestre del año y para 2025 son menos optimistas. El FMI ha revisado a la baja su previsión de crecimiento del PIB para Ucrania, situándola entre el 2,5% y el 3,5%, lo que supone una disminución respecto al crecimiento del 3,2% previsto anteriormente en las Perspectivas de la economía mundial de abril. Este ajuste refleja el impacto del aumento de las acciones militares dirigidas contra las infraestructuras ucranianas y la disminución de la confianza de los consumidores y las empresas a medida que avanza la guerra.
El programa del FMI forma parte de una ayuda exterior más amplia, estimada en unos 122.000 millones de dólares a lo largo de cuatro años, procedente principalmente de países donantes. Si las necesidades de financiación exterior aumentaran en un escenario más grave, las necesidades podrían ascender a 141.000 millones de dólares. En estas estimaciones no se incluye un posible préstamo de 50.000 millones de dólares de las democracias industriales del G7, que depende de consideraciones jurídicas en torno al uso de los activos rusos congelados.
Gavin Gray, jefe de la misión del FMI en Ucrania, subrayó la importancia del apoyo internacional continuado para mantener la estabilidad económica y los logros de crecimiento de Ucrania. También mencionó las negociaciones en curso con los tenedores de bonos para la reestructuración de la deuda, que se han intensificado recientemente. A pesar de las perspectivas económicas más sombrías, Gray no espera repercusiones significativas en estas discusiones, ya que se basan en un marco a medio plazo que sigue siendo en gran medida coherente.
Según Gray, la asistencia sostenida del FMI y de los socios externos es crucial para que Ucrania conserve los avances en materia de estabilización macroeconómica logrados el año pasado. Destacó la necesidad de una base jurídica sólida para el uso de los activos rusos a fin de garantizar que no perturbe el sistema financiero mundial, y aseguró que el FMI reevaluará el marco financiero de Ucrania en caso de que se materialice el préstamo de 50.000 millones de dólares del G7.
Reuters colaboró en la elaboración de este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.