Keir Starmer está a punto de convertirse en el próximo Primer Ministro del Reino Unido, ya que se prevé que su Partido Laborista obtenga una amplia mayoría en las elecciones parlamentarias, según un sondeo a pie de urna publicado hoy. Se espera que el Partido Laborista obtenga 410 escaños de los 650 disponibles, lo que supondría el fin de un periodo de 14 años de liderazgo conservador.
Se prevé que el Partido Conservador, dirigido por Rishi Sunak, experimente pérdidas significativas, con proyecciones que indican que obtendrá sólo 131 escaños, una reducción drástica respecto a los 346 escaños que tenía antes de la disolución del Parlamento. El sondeo a pie de urna sugiere que los votantes responsabilizan a los conservadores de la actual crisis del coste de la vida y de la agitación política que ha llevado a cinco primeros ministros diferentes desde 2016.
Históricamente, las encuestas a pie de urna han sido indicadores fiables en el Reino Unido, con solo una predicción incorrecta en las últimas seis elecciones nacionales. Esto ocurrió en 2015, cuando la encuesta a pie de urna pronosticó incorrectamente un parlamento indeciso, pero los conservadores se alzaron con la mayoría. Se espera que los resultados oficiales definitivos se anuncien en las próximas horas.
Las elecciones, convocadas por Sunak en mayo, fueron una sorpresa para muchos, incluidos miembros de su propio partido, ya que se iniciaron cuando los conservadores estaban aproximadamente 20 puntos por detrás de los laboristas en las encuestas de opinión. La decisión de Sunak de convocar elecciones anticipadas fue una apuesta que parece no haber merecido la pena, ya que la diferencia entre los dos partidos se mantuvo constante a lo largo de lo que se ha descrito como una campaña mediocre para los conservadores.
La campaña se vio empañada por una serie de percances de Sunak, entre ellos un incidente en el que quedó empapado por la lluvia mientras anunciaba las elecciones y un escándalo de apuestas de los candidatos conservadores sobre la fecha de las elecciones.
Además, la decisión de Sunak de abandonar los actos conmemorativos del Día D en Francia para acudir a una entrevista televisiva fue recibida con desaprobación por los veteranos y suscitó dudas sobre su juicio entre sus compañeros.
A pesar de la falta de entusiasmo abrumador por Starmer, el mensaje del líder laborista abogando por el cambio parece haber calado en el electorado británico. Este cambio contrasta con las recientes elecciones en Francia, donde el partido de extrema derecha Rally Nacional de Marine Le Pen logró avances significativos. En el Reino Unido, sin embargo, el público se ha inclinado hacia el centro-izquierda, como reflejan los resultados de las encuestas a pie de urna.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.