En vísperas de la cumbre del Grupo de los Siete (G7) que comienza el jueves en Italia, Oxfam ha pedido a las naciones más ricas del mundo que aumenten sus compromisos financieros para hacer frente al hambre en el mundo. La organización benéfica sugiere que un mero 3% del gasto militar del G7 podría contribuir significativamente a resolver la actual crisis alimentaria y de deuda.
Se espera que el G7, que incluye a Estados Unidos, Japón, Canadá, Alemania, Francia, Italia y Gran Bretaña, aborde una serie de temas en la cumbre, como el cambio climático, la migración y la pesada carga de la deuda a la que se enfrentan los países en desarrollo. El análisis de Oxfam indica que erradicar el hambre en el mundo requeriría una inversión anual de 31.700 millones de dólares y que la contribución del G7 al alivio de la deuda de los países más pobres sería de unos 4.000 millones de dólares. En conjunto, estas cantidades representan aproximadamente el 2,9% de los 1,2 billones de dólares que el G7 destinó a gasto militar el año pasado.
Max Lawson (TYO:2651), responsable de políticas de desigualdad de Oxfam Internacional, criticó la disparidad en las prioridades de gasto de los gobiernos, destacando la urgente necesidad de fondos para evitar el hambre en comparación con la financiación fácilmente disponible para fines militares. En la actualidad, 167 millones de personas padecen hambre a nivel de crisis, según las normas de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF). La CIF también ha indicado que la insuficiencia de fondos está obstaculizando su capacidad para hacer frente a las crecientes necesidades, lo que puede dar lugar a una reducción de sus operaciones.
Además de instar a una reasignación del gasto militar, Oxfam ha recomendado varias medidas a considerar por el G7. Entre ellas, detener las exportaciones de armas que puedan utilizarse en crímenes de guerra, aumentar los impuestos a los multimillonarios, proporcionar alivio de la deuda para que los países más pobres puedan invertir en desarrollo y cumplir los compromisos existentes en materia de ayuda y financiación climática. Oxfam subrayó que la suma de los compromisos de ayuda pendientes y las promesas de financiación climática incumplidas de los siete países asciende aproximadamente a 15 billones de dólares adeudados a las naciones del Sur Global.
Lawson señaló el marcado contraste entre los retos a los que se enfrentan las familias que luchan por conseguir alimentos y un sistema fiscal que favorece a los ricos. Subrayó el potencial de impacto significativo de lo que considera un compromiso financiero relativamente pequeño por parte de las naciones del G7.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.