El inminente cierre del gobierno de los Estados Unidos, que se espera que interrumpa los sectores de la vivienda y los seguros, está causando preocupación entre los observadores de la industria. Según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios, los compradores potenciales pueden enfrentar dificultades para obtener hipotecas para propiedades ubicadas en áreas propensas a inundaciones debido al cierre.
El analista Jaret Seiberg de Cowen Washington Research Group anticipa interrupciones significativas en las ventas de viviendas a lo largo de costas y ríos. Esto se produce a medida que aumentan los riesgos del cambio climático, lo que aumenta la amenaza de inundaciones en estas regiones vulnerables.
El Programa Nacional de Seguro contra Inundaciones (NFIP), que proporciona cobertura para propiedades en riesgo de inundación, también está en peligro. Sin la intervención del Congreso, el NFIP podría agotar sus fondos para el 30 de septiembre. La estabilidad financiera del programa es crucial para garantizar que los propietarios de viviendas en áreas de alto riesgo puedan obtener una cobertura de seguro adecuada.
Shannon McGahn, cabildera de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios, ha advertido que un cierre prolongado del gobierno exacerbaría estos problemas. Las entidades federales podrían verse obligadas a suspender los requisitos de seguro contra inundaciones para facilitar las transferencias de pólizas durante el cierre. Esta suspensión podría dejar a los nuevos propietarios sin cobertura suficiente contra posibles daños por inundaciones.
El impacto potencial del cierre en estos sectores subraya la importancia de una rápida acción del Congreso para evitar interrupciones en las ventas de viviendas y proteger a los propietarios en áreas propensas a inundaciones.