Investing.com - Se ha convertido en el cierre parcial del Gobierno más longevo de la historia de Estados Unidos. Donald Trump sigue empeñado en la necesidad de poner un muro que separe la frontera con México. Los demócratas y republicanos no se ponen de acuerdo, y a falta de entendimiento, se produce el famoso ‘shutdown’.
Esta nueva situación es muy distinta a las anteriores (en toda la historia del país, ha sucedido hasta en 21 ocasiones). Desde el 22 de diciembre, la situación se prolonga y tal y como explica Olga Rodríguez, experta en estudios norteamericanos y periodista de El Español, “no parece que se vaya a solucionar rápido” debido a que las posturas entre demócratas y republicanos “están muy lejanas”.
Con este panorama, la economía del país vuelve a estar en la picota. Y si los mercados y los datos macro no invitan al optimismo, este nuevo escenario, tampoco. No obstante, Celso Otero, analista de Renta 4 (MC:RTA4), dice que “si bien está pasando de puntillas, el cierre del Gobierno” tiene sus consecuencias. A pesar de ello, el experto matiza que “existen otros factores, como la guerra comercial,” que están marcando mucho más el devenir de las inversiones que el ‘shutdown’.
No piensan lo mismo en Link Securities. Su departamento de análisis enfatiza que “comenzará a atraer su atención, generando cierta ansiedad en los mercados financieros estadounidenses”.
La economía ya se resiente del ‘shutdown’
Basta con mirar los primeros indicadores para comprobar que no es un asunto menor. Más de 400.000 empleados federales considerados esenciales trabajarán sin remuneración y 380.000 empleados federales se encontrarán de baja temporal hasta que se resuelva esta situación. “Muchas personas se quedan sin cobrar y, de momento, están en el paro. Esto genera un impacto negativo en el consumo”, subraya Celso Otero. De hecho, Olga Rodríguez narra que varios funcionarios están pidiendo excedencias para poder trabajar y cobrar nuevos sueldos.
Por otra parte, la vivienda y el alquiler también están en problemas. Según un estudio de la inmobiliaria Zillow, los empleados deben pagar un total de 438 millones de dólares al mes en alquileres y préstamos hipotecarios. Algo que corrobora Victoria Torre, analista de Self Bank. “Es cierto que, en estos casos, cuando se reabre el gobierno se cobra retroactivamente, aunque tampoco nadie garantiza que así sea. Además, aquellas personas que no cuentan con muchos recursos y viven al día, se pueden encontrar con problemas para comprar alimentos o pagar el alquiler”.
Así, varios sectores empresariales se resienten debido a la ‘necesidad’ del presidente Trump por poner un muro. “Una de las industrias más afectadas es la del turismo, ya que muchas terminales de aeropuertos se han visto obligadas a cerrar sus puertas”, señala Rodríguez. El principal motivo de la clausura de los recintos es porque el personal del control de equipajes pertenece a la administración”, subraya la experta.
El sector agrícola también nota el cierre parcial de la Casa Blanca. Casi la totalidad de los agricultores no cobran con las ayudas prometidas por parte de la administración Trump, por lo que llevan tres semanas que no reciben un sólo dólar para poder trabajar en sus parcelas. Lo mismo ocurre con la Sanidad, pues se han suspendido las inspecciones sanitarias.
Otro sector como el cervecero también está en problemas. La oficinal del Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) ha sido suspendida por el cierre parcial del gobierno. Por tanto, las cerveceras no han podido obtener las aprobaciones necesarias de la oficina de impuestos y comercio de la agencia, que van desde permisos para nuevas instalaciones hasta el etiquetado.
"La industria de la cerveza artesanal representa más del 23% del mercado de cerveza estadounidense de 114.000 millones de dólares, y las pequeñas cerveceras y fabricantes de productos introducen productos nuevos y de temporada con menos tiempo que las cervecerías más grandes, lo que hace que los retrasos en los permisos sean particularmente impactantes", dijo el presidente de la Asociación de Cerveceros, Bob Pease.
Y Wall Street en el horizonte
Con todos los sectores afectados por el cierre del Gobierno hay varias empresas cotizadas que cotizan en rojo por este hecho. Las acciones de American Airlines (NASDAQ:AAL) cayeron la semana pasada por menores ingresos y facturación interna durante las últimas semanas. Es más, se ha bajarado la posibilidad de que se cierren varias aerolíneas hasta que se desenquiste esta situación.
"El cierre del gobierno afectará al negocio de viajes corporativos de la industria, y más si se prolonga en el tiempo. American, en particular, tiene exposición al gobierno con su centro de operaciones en el Aeropuerto Nacional Reagan de Washington, DC. Creemos que los contratistas del gobierno no viajarán durante este cierre, y cuanto más tiempo pasa, mayor es el impacto ", afirmaron recientemente desde American Airlines.
BMO Capital también está sufriendo estragos y sus principales directivos comentaron a Bloomberg que “están viendo como la facturación es netamente inferior a antes del cierre”.
Pero podría ser peor. Varios analistas estadounidenses advierten también que sectores como el de la tecnología, el de la Inteligencia Artificial o la robótica entren en una espiral negativa. “El cierre parcial ha resultado en una reducción del 85% en el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología, una reducción del 60% en el análisis del Director de Inteligencia Nacional y personal de operaciones, y una reducción del 45% en la fuerza laboral de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Seguridad Cibernética”, recalca JP Morgan (NYSE:JPM).
Además, el regulador americano bursátil (Sec) también permanece clausurado por lo que ha dejado de tramitar los documentos de entrada en bolsa y se ha retrasado la concesión de permisos de explotación petrolera y gasística. Además tampoco se imponen posibles sanciones.