Por Sara Busquets
Investing.com - La llegada de Acción de Gracias y el Black Friday marcan en EE.UU. el inicio de la temporada navideña lo que, durante años, se traducía en un aluvión de colas en las calles y de compras aprovechando las ofertas. Este año, sin embargo, la situación es algo distinta, y la tradición podría verse ensombrecida por la segunda ola de la pandemia y sus posibles restricciones, que vuelven a imponerse al otro lado del Atlántico para frenar el aumento de los contagios. Una situación a la que debemos añadir las recientes elecciones presidenciales que, a la espera de formalizar el cambio de mando, pueden llevar a muchos consumidores a recortar el gasto.
Sabemos que, tradicionalmente uno de los sectores que más se beneficia del Black Friday es el sector minorista. Y este año no va a ser la excepción. Valores como Amazon (NASDAQ:AMZN), Etsy Inc (NASDAQ:ETSY), Macy’s (NYSE:M), Walmart (NYSE:WMT) o Target (NYSE:TGT) estarán en la mente de todos por un posible aumento en su facturación, así como el de aquellas compañías ligadas a los procesos de compra, como es el caso de PayPal (NASDAQ:PYPL). También tecnológicas como Apple (NASDAQ:AAPL) o Best Buy Co Inc (NYSE:BBY) pueden impulsar sus ventas en este último tramo del año, así como empresas de entretenimiento como Netflix (NASDAQ:NFLX) o Peloton (NASDAQ:PTON), uno de los sectores que más ha podido sacar partido al virus durante todo 2020.
Lo que no tenemos tan claro es que el Black Friday de este año se tan trascendental como acostumbra. Muchos de los nombres anteriores ya se han beneficiado durante todo el año del tenernos que quedar en casa, por lo que ya hemos visto impulsos en bolsa notables previos a esta fecha. “Han sido los grandes beneficiados del distanciamiento social”, nos recuerda Samana, de Wells Fargo (NYSE:WFC), que recomienda que la porción de cartera destinada a este sector no supere el 15%. “La tecnología o los servicios de comunicación seguirán beneficiándose de la pandemia, pues ocuparán un lugar destacado en los regalos de estas próximas navidades”. Desde Forbes nos recuerdan que muchos de estos valores seguirán disfrutando del último rally, independientemente de las ventas de estos días o de la situación que nos depare la pandemia. Porque si hay un sector que se beneficia tanto si hay mayores restricciones como si no, este no es otro que del ecommerce.
También es cierto que las pautas a los que nos tenían acostumbrados los comerciantes con el Black Friday están cambiando este año. Ya no hay que ceñirse a un solo fin de semana, llevamos viendo ofertas todo el mes, también a este lado del Atlántico. “Una manera de repartir las ventas durante todo noviembre”, dice Josh Simpson, consejero financiero de Lake Advisory Group. El comercio electrónico ofrece muchas ventajas en el momento actual y, aunque puede verse impulsado por las ofertas, seguirá siendo la primera opción de compra de muchos ciudadanos en todo el mundo, provocando nuevos impulsos de negocios y acciones.
“Siempre hay mucha especulación rodeando a este día, pero para los inversores a largo plazo es ruido para nada. Al final, estamos hablando de un solo día, y hay muy pocas excepciones en las que la facturación de todo un año dependa de ello, sobre todo para un evento que tiene tan corta duración”, nos recuerda Kevin Mercadante en DoughRoller. No esperamos por lo tanto que cambie mucho la película, aunque eso no significa que no estemos pendientes de las ventas de aquí a final de año.
“Lo importante aquí es recordar que no debemos depender del timing del mercado, sobre todo este año en el que las pautas de gasto pueden alterar el comportamiento de ciertos valores en los días antes de fin de año. Si va a tomar una decisión en función del Black Friday, asegúrese de que se trata de una decisión que proteja sus objetivos financieros generales, y no una que sirva para hacer dinero rápido”, sentencia Simpson.