Amazon (NASDAQ:AMZN) ha iniciado el desarrollo de una nueva norma para verificar las compensaciones de carbono en reforestación y agrosilvicultura, con el fin de hacer frente a la limitada oferta de compensaciones con etiqueta de calidad y cumplir su objetivo de emisiones netas cero de gases de efecto invernadero para 2040.
El gigante de la venta en línea y la computación en nube, fundado por Jeff Bezos, colabora con el registro de carbono Verra en el marco denominado Abacus. Esta medida ha suscitado preocupación entre los críticos por la posible confusión del mercado y la rebaja de las normas de compensación.
Las compensaciones de carbono permiten a las empresas compensar sus emisiones invirtiendo en proyectos que reducen el carbono, por ejemplo mediante la reforestación.
Sin embargo, el mercado voluntario de compensación de carbono, valorado actualmente en 2.000 millones de dólares, es relativamente pequeño debido a la escasez de proyectos que puedan confirmar sus beneficios climáticos. El último informe de sostenibilidad de Amazon reveló que generó 71,3 millones de toneladas de emisiones equivalentes de dióxido de carbono en 2022, de las cuales 54,98 millones procedían de su cadena de suministro.
La norma Abacus, que estará disponible en unas semanas según Verra, se creó para ofrecer una alternativa al principal sello de calidad desarrollado por el Consejo de Integridad para el Mercado Voluntario de Carbono (ICVCM), que cuenta con el respaldo de Bezos a través de su Fondo para la Tierra, dotado con 10.000 millones de dólares.
El responsable de neutralización de carbono de Amazon, Jamey Mulligan, expresó que, aunque la empresa apoya el trabajo del ICVCM, busca un estándar más ambicioso para garantizar que las inversiones en créditos tengan un impacto sustancial y verificado en las emisiones.
Gigantes tecnológicos como Alphabet, Meta, Microsoft y Salesforce han expresado su intención de adquirir hasta 20 millones de toneladas métricas de créditos certificados por Abacus. A pesar de la aparición de esta norma alternativa, Pedro Martins Barata, copresidente del panel de expertos de la ICVCM, espera que Abacus acabe integrándose en la ICVCM para evitar confusiones en el mercado.
La etiqueta Abacus exigirá la divulgación pública de datos sobre el carbono almacenado por los proyectos, y éstos tardarán entre dos y tres años en recibir la etiqueta, supeditada al crecimiento de los árboles y a la prueba posterior de absorción de carbono.
Amazon está examinando actualmente más de 70 propuestas de promotores y prevé restaurar decenas de miles de hectáreas de tierras degradadas. Mulligan subrayó que la compra de créditos de carbono por parte de Amazon no sustituirá los esfuerzos de la empresa por descarbonizar sus operaciones.
Perspectivas de InvestingPro
El enfoque proactivo de Amazon en el desarrollo de la norma Abacus para las compensaciones de carbono es un movimiento estratégico de la empresa en su intento de cumplir su ambicioso objetivo de emisiones netas cero para 2040. La iniciativa subraya el papel de Amazon como actor destacado en el sector de la gran distribución, que cada vez integra más la sostenibilidad en sus principales prácticas empresariales, un aspecto que destaca uno de los consejos de InvestingPro.
Los datos de InvestingPro ilustran la importante presencia de Amazon en el mercado, con una capitalización bursátil ajustada de 2,030 billones de dólares. Este músculo financiero respalda la capacidad de la empresa para invertir en proyectos de sostenibilidad a gran escala como Abacus. Además, los datos muestran un saludable crecimiento de los ingresos del 12,54% en los últimos doce meses hasta el primer trimestre de 2024, lo que indica la continua expansión de la empresa y su potencial para financiar sus objetivos de sostenibilidad.
La salud financiera de la empresa se demuestra además por un sólido margen de beneficio bruto del 47,59%, lo que indica que Amazon opera con un colchón significativo para absorber los costes asociados a sus iniciativas medioambientales. Además, la capacidad de la empresa para generar un elevado crecimiento del EBITDA del 66,24% durante el mismo periodo refleja su eficiencia operativa y su potencial para canalizar más recursos hacia la consecución de sus objetivos de neutralidad de carbono.
En consonancia con su fortaleza financiera, Amazon también cotiza cerca de su máximo de 52 semanas, con un porcentaje del precio de ese máximo del 97,65%. Esta confianza del mercado, unida a la rentabilidad de la empresa en los últimos doce meses, como se señala en otro consejo de InvestingPro, proporciona una base sólida para que Amazon siga adelante con su programa de sostenibilidad sin comprometer sus compromisos financieros con los accionistas.
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Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.