Por Geoffrey Smith
Investing.com - Este es un momento histórico en los mercados de valores. Como tal, los historiadores reconocerán lo que está sucediendo en este momento mejor que aquellos capacitados en las disciplinas basadas en matemáticas que normalmente se requieren para el éxito en los mercados financieros.
No lo disfrutarán mucho.
Las victorias obtenidas por los exuberantes comerciantes minoristas contra los fondos de cobertura de venta al descubierto son reconocibles a partir de una gran cantidad de revueltas y revoluciones a lo largo de los siglos. Todos ellos tienen su momento característico cuando los oprimidos y desfavorecidos se dan cuenta, de repente, del poder que tienen cuando se unen y se organizan.
Los ganadores de esta semana en GameStop Corp (NYSE:GME) o AMC Entertainment Holdings Inc (NYSE:AMC) también fueron vistos asaltando la Bastilla en 1789, tirando te en el puerto de Boston en 1773 y persiguiendo a los monarcas europeos de sus palacios en 1848.
Este es un momento social y cultural tanto como financiero. Tomemos este ejemplo, uno de los innumerables, de la cuenta de Twitter @WallStreetBets Intern: “Un recordatorio para todos los que tienen. #WSB $ GME $ AMC $ BB Ni un solo ejecutivo de Wall Street fue castigado por la crisis financiera de 2008. Que se j****", decía el tuit.
O este de otra cuenta de Twitter con el nombre de Stonk Daddy de AOC (la revuelta no es más que bipartidista):
"Nunca había visto una mejor oportunidad para joder a la gente que odio con tanta pasión. Cada protesta, cada acción directa en la que he estado".
Es muy obvio que es un deseo de venganza por encima de todo. Las quejas pueden ser específicas, como las de aquellos que han estado en el lado equivocado de prácticas bruscas de vendedores en corto, comerciantes de alta frecuencia o simplemente casas de bolsa de Main Street. O pueden ser generales, dirigidos contra el ‘establishment’ de Wall Street (que, como era de esperar, incluye una Comisión de Bolsa y Valores que apenas está despertando a la multitud fuera de sus puertas).
"CÓMETE. A LOS RICOS. Que se j**** los trajes”, han dicho en Twittter, y así sucesivamente. Este es un momento alimentado por la ira.
Sabemos por la historia lo que sucede a continuación. La mayoría de las veces, la mafia, intoxicada por su propio éxito, comete excesos que endurecen la determinación de sus oponentes, que casi siempre cuentan con mejores recursos y, cuando las cosas están bajas, igualmente desesperados. La casta gobernante recupera el valor, la solidaridad de los rebeldes se resquebraja bajo la presión y el statu quo se restablece mediante una represión feroz. La narrativa es la misma desde la antigüedad (la revuelta judía del 70 d.C.) a través de la Edad Media (París 1358, Londres 1389) hasta la era del Imperio (Escocia, 1746, el Volga en 1775, Prusia 1849, India 1857) y hasta la era moderna. La lista es literalmente interminable.
Incluso los levantamientos más exitosos generalmente se vuelven amargos cuando los vencedores se vuelven unos contra otros. La unidad de la mafia o la fuente de su fuerza es estrictamente limitada en el tiempo. Alguna respuesta a la pregunta "¿Cuándo vendo GME/ AMC/BB?" producirá perdedores, que desviarán su rabia del ‘establishment’ hacia los traficantes y traidores.
Nada de esto es para denigrar los orígenes y las realidades detrás de los agravios que impulsan este momento. No es nuestro trabajo pasar por alto las desigualdades creadas por el último ciclo de auge y caída, o la injusticia implícita en la estructura del mercado actual. Es solo para decir que momentos como este generalmente terminan con cabezas entre barrotes o cuerpos atados a bocas de cañón. Asegúrate de que el tuyo no sea uno de ellos.