Ante la inminente amenaza de una contingencia atmosférica por partículas debido a la quema masiva de pirotecnia y encendido de fogatas en la celebración de Año Nuevo, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, a través de la Dirección General de Calidad del Aire, ha emitido una serie de recomendaciones cruciales para salvaguardar la salud de la ciudadanía.
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Según datos históricos de calidad del aire, el 1 de enero en la Ciudad de México y su zona metropolitana suele presentar condiciones de muy mala y extremadamente mala calidad del aire por partículas. Estas partículas, finas y portadoras de metales y compuestos tóxicos, representan un riesgo significativo para la salud.
A pesar de que las quemas tradicionalmente ocurren a la medianoche, las mayores concentraciones de contaminantes se registran entre la 1:00 y las 5:00 de la madrugada. Este fenómeno afecta principalmente a grupos vulnerables como niños, adultos mayores, personas embarazadas y aquellos con afecciones cardiacas y respiratorias.
La quema de fogatas y pirotecnia puede provocar: