Las acciones globales siguen operando bajo presión vendedora tras la fuerte liquidación de activos iniciada en octubre.
En este momento, los principales índices accionarios se encuentran operando en modo bajista, con el índice de mercados desarrollados MSCI World lateralizando dentro del rango 1.950-2.090 puntos, por lo que una caída en busca de una nueva validación del piso de los 1.950 puntos (nivel del 38,2% de Retrocesos de Fibonacci) representa un ajuste potencial de un 4% para los desarrollados, mientras que una ruptura por debajo de dicho soporte gatillaría nuevas órdenes de venta, presionando a los mercados desarrollados hacia el próximo piso en torno a la zona de los 1.850 puntos (nivel de Retroceso de Fibonacci del 50%), lo que representa una caída cercana al 8% desde los niveles actuales.
Por su parte, los indicadores técnicos RSI y MACD siguen operando a la baja en el gráfico de cierres semanales y con espacio para nuevos retrocesos, por lo que no esperamos señales claras de recuperación en el corto plazo.
Por su parte, el índice de mercados emergentes se encuentra operando cerca de la resistencia de corto plazo definida por el nivel de los 1.000 puntos, por lo que un avance por sobre dicho nivel confirmaría el cambio de tendencia en el índice MSCI Emerging Markets, gatillando nuevas señales de compra e impulsando al índice en busca de la siguiente resistencia en la zona de los 1.100 pts.
A la baja, el MSCI Emerging Markets posee un piso en torno al nivel de los 920 puntos, por lo que una caída por debajo de dicho nivel podría presionar a los emergentes hacia el soporte de los 900 pts. (nivel de Retroceso de Fibonacci del 50%), lo que representa una caída de un 8% desde niveles actuales.