Los precios al consumidor decrecieron 0.35% quincenal durante la primera mitad de mayo (Banorte-Ixe: -0.5%; consenso: -0.43%; rango: -0.6% a -0.21%). La inflación subyacente resultó por encima de lo esperado al incrementarse 0.14% quincenal. La principal desviación de nuestro estimado viene por una subestimación de la variación negativa de los precios de las tarifas eléctricas, que restaron 58pbs a la variación total del índice (vs. nuestro -52pbs). Adicionalmente, sobre estimamos la caída de los precios agrícolas (-4pbs vs. nuestro -7pbs). Finalmente, también subestimamos la inflación subyacente por 7pbs, derivado principalmente de mayores precios de mercancías (+5bps vs. nuestro +2bps) y de “otros servicios” (+5bps vs. nuestro +1bps), como se observa en la tabla abajo.
La inflación de la primera mitad de mayo se explica por el descenso de las tarifas eléctricas así como por la caída en los precios agrícolas. Las tarifas eléctricas restaron 58pbs a la inflación total durante la primera mitad de mayo, como ya mencionamos, resultado de la aplicación de los descuentos de verano en algunas regiones del país y a pesar de que el ponderador de este elemento se redujo significativamente con la nueva metodología (ponderador actual: 2.8%; previo: 3.6%). Mientras tanto, las presiones sobre los precios de frutas y verduras siguen cediendo (-2.77% 2s/2s) como resultado de fuertes bajas en el precio de la calabacita (-26.2%); la cebolla (-18.5%); los limones (-12.2%) y el pepino (-16.7%), entre otros. Por su parte, los productos pecuarios siguen resintiendo los efectos de la epidemia de gripe aviar con un incremento de 1% quincenal en el período en cuestión.