El índice dólar cerró la jornada con una pérdida de 0.6%, tras darse a conocer que el Índice de Gerentes de Compra del ISM del sector servicios cayó a 59.9 puntos en enero, lo que representa el crecimiento más lento del sector desde febrero de 2021. Esto se suma a una serie de indicadores que han mostrado que 2022 empieza con una desaceleración económica en EE.UU.
El euro se apreció con fuerza, en 1.2%, operando alrededor de $1.143 unidades en el mercado spot. La moneda subió a un máximo de tres semanas frente al dólar después de que los comentarios de la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, alimentaron las expectativas de un endurecimiento de la política monetaria más acelerado al que se tenía previsto. Ahora, los mercados descuentan un aumento de 10 pb en junio, con una probabilidad del 80%, y, con una de casi el 100%, subidas de 40 pb para fin de año. Por su parte, la libra esterlina se incrementó a un máximo de dos años frente al euro después de que el Banco de Inglaterra elevó la tasa de interés al 0.5%.
En lo que respecta a las monedas emergentes, estas terminaron el día mixtas. En particular, el peso chileno perdió 1.1%, debilitándose por tercera sesión consecutiva, debido a que los precios del cobre cayeron por las preocupaciones sobre la demanda de China y Europa. Por su parte, el peso colombiano y el mexicano reportaron pérdidas acotadas debido a que los precios del petróleo repuntaron por la escasez de oferta; la segunda fue la décima divisa más depreciada durante el día, al registrar una pérdida de 0.2% respecto al cierre previo, que equivale a 3.3 centavos, cotizando en torno a las $20.60 unidades frente al dólar en el mercado interbancario. A lo largo del día, el tipo de cambio alcanzó un mínimo en $20.52 y un máximo en $20.65.
