La paridad dólar/peso chileno retrocedía en la sesión, extendiendo las pérdidas de septiembre a un 2,3%.
Tras alcanzar máximos del año en torno a la zona de los $700, el billete verde ha estado operando bajo una fuerte presión vendedora por toma de ganancias. Sin embargo, la tendencia alcista iniciada a fines de febrero en torno al nivel de los $590 se mantiene intacta mientras la paridad siga operando por sobre el soporte definido por el canal alcista en torno a los $660, por lo que un rebote técnico en torno a dicho nivel podría gatillar nuevas órdenes de compra en el tipo de cambio.