La economía de Estados Unidos creció a un ritmo modesto en las últimas semanas y las manufacturas han sido sacudidas por una desaceleración global, mientras que las compras de los consumidores ofrecieron señales dispares sobre la fortaleza del gasto de los hogares, informó el miércoles la Reserva Federal.
La guerra comercial entre Washington y Pekín fue un aspecto destacado del último compendio de evidencia anecdótica de empresas del banco central de Estados Unidos, conocido como Libro Beige.
El informe, publicado antes de la reunión de política de la Fed del 17 al 18 de septiembre en la que se espera una rebaja de las tasas de interés para contrarrestar la desaceleración económica, sugirió que las empresas estadounidenses no esperaban pronto una recesión.
“Si bien las preocupaciones por los aranceles y la incertidumbre comercial continuaron, la mayoría de las empresas se mantuvo optimista sobre las perspectivas a corto plazo”, según el informe de la Fed.
El banco central dijo que el crecimiento del empleo parecía ser “modesto” en las últimas semanas, un ritmo en línea con las cifras del informe anterior. Sin embargo, la actividad manufacturera fue ligeramente más débil que durante el período previo.