Las acciones globales caían con fuerza en la sesión del martes en una jornada de menor apetito por riesgo por temor a una desaceleración global.
El rally de la renta variable iniciado a fines de diciembre había comenzado a perder impulso hace un par de sesiones, por lo que tras el recorte de las previsiones de la economía mundial por parte del FMI, los inversiones comenzaron a ponderar nuevamente sus temores sobre el crecimiento mundial, tomando utilidades luego del avance de las últimas cuatro semanas.
El índice mundial de acciones ACWI viene operando dentro de un canal bajista desde octubre del 2018, por lo que tras la recuperación de las últimas semanas, los inversionistas globales han comenzado a cerrar posiciones en renta variable por un menor apetito por riesgo en un escenario de incertidumbre.
En el corto plazo, deberíamos ver nuevamente a la Renta Variable presionada por una fuerte ola vendedora, con flujo hacia renta fija en busca de refugio.
A la baja, podríamos ver un ajuste cercano a un 8% desde los niveles actuales, tomando como referencia los mínimos de diciembre como zona de soporte clave.