Tras un rebote técnico en la zona de los 5.000 puntos, las acciones chilenas comenzaron a mostrar nuevos signos de debilidad en torno a la barrera de los 5.250 puntos, gatillando nuevas órdenes de venta que mantienen a la bolsa local perdiendo cerca de un 7% en el año.
A la baja, una caída por debajo de la marca de los 5.000 puntos debería llevar al principal índice bursátil nacional en busca del próximo piso técnico en torno a la zona de los 4.900 puntos, por lo que aún mantenemos nuestro sesgo bajista de corto plazo mientras el IPSA siga operando bajo la media de 25 semanas, mientras que el sesgo bajista de largo plazo se mantiene definido por la media móvil de 50 semanas.