Tras posicionarse sobre la zona de los 3.900 puntos a fines de marzo, el principal índice accionario local lleva más de tres meses lateralizando dentro de un acotado rango de trading delimitado por el soporte de los 3.900 puntos y la zona de resistencia de los 4.040 puntos, mostrando fuertes signos de agotamiento cada vez que busca una ruptura del límite superior del canal.
La bolsa nacional acumula un retorno superior al 9% durante el 2016, pero tomando como punto de partida la validación del soporte de los 3.400 puntos el 21 de enero, el IPSA mantiene un retorno superior al 15%, por lo que si el IPSA no es capaza de superar la barrera técnica de los 4.040 puntos, podríamos ver rápidamente un aumento en la presión vendedora y una ruptura del piso psicológico de los 3.900 puntos.
Técnicamente, los indicadores RSI y MACD vienen mostrando fuertes señales de agotamiento desde fines de abril, por lo que el rally iniciado en la zona de los 3.400 puntos podría haber tocado techo.
A la baja, una fuerte ruptura del soporte de los 3.900 puntos confirmaría las señales de venta y podría llevar al IPSA en busca del soporte en la zona de los 3.800 puntos (nivel del 38,2% de los Retrocesos de Fibonacci) y posteriormente hacia la zona del Retroceso de Fibonacci del 50% en torno al nivel de los 3.730 puntos.
Tomando en consideración que el IPSA ha fallado en varias oportunidades en superar la zona de resistencia de los 4.040-4.050 puntos y que actualmente el premio por riesgo que significa estar expuesto en las acciones nacionales es poco atractivo, es recomendable estar fuera de la bolsa nacional mientras el IPSA siga operando dentro del rango y esperar una confirmación de la ruptura del IPSA por sobre la barrera de los 4.050 puntos.