La Reserva Federal de Estados Unidos cumplió con las expectativas del mercado al mantener sin cambio la tasa de interés en 5.25%. Esta decisión fue unánime por parte del Comité (FOMC), argumentando que esto les permite hacer una evaluación sobre el nivel de estrechamiento necesario para que la inflación converja al objetivo de 2.0%. También reiteró que el Comité estará preparado para ajustar la postura de la política monetaria según corresponda, en caso que surjan riesgos que puedan impedir el logro de los objetivos de la FED.
Como normalmente ocurre, los pronósticos económicos se siguen moviendo. Para la tasa de interés, la Fed subió su pronóstico para este 2023, de 5.1% a 5.6% y para 2024 de 4.3% a 4.6%, con respecto a los publicados en marzo pasado. Sin embargo, la tasa de desempleo la bajó de 4.5% a 4.1%, pero el PIB esperado de este año lo subió de 0.4% a 1.0% y el PCE Inflación bajó de 3.3% a 3.2%.
Es probable que el hecho de subir su pronóstico de las tasas lo hayan hecho para no generar un optimismo desmedido en los mercados financieros y afectar la tendencia de la inflación.
La bolsa neoyorquina se mantuvo estable durante la jornada del miércoles, concluyendo los tres principales índices con movimientos mixtos moderados, con el Dow Jones perdiendo 0.68%, el S&P-500 con ganancia de 0.08% y el Nasdaq subiendo 0.39%, quedando sus principales indicadores con señales de alza que sugieren mantener, aunque hay que poner objetivos en caso que baje, ya que en algunos casos presentan niveles de sobre compra.
En México, la bolsa medida por el índice S&P/BMV IPC cerró con ganancia de 1.05%, en 55,145.43 quedando cerca de los niveles que registró en la primera semana de mayo, con lo que deja el siguiente objetivo alrededor de 56,340 puntos.
El peso sigue cuesta arriba frente al dólar al cerrar en $17.12, con ganancia de 0.49, mientras el dólar siguió cayendo al cerrar el índice DXY en 103.02.