Las elecciones presidenciales en EE.UU. pone nerviosos a los mercados

Los índices bursátiles estadounidenses están registrando principalmente movimientos negativos, presionados por unos informes trimestrales decepcionantes de empresas cuyos resultados no han logrado estar a la altura de las expectativas. Un brote reciente de contaminación alimentaria en varias sucursales de McDonald's (NYSE:MCD) en Estados Unidos empeoró la situación, provocando una caída del 5,1 % en el valor de las acciones de la empresa. Las próximas elecciones presidenciales en la Superpotencia, a la vuelta de la esquina, así como las continuadas tensiones geopolíticas, siguen frenando al mercado.

Dentro del mercado de divisas, el dólar estadounidense se mantuvo estable gracias a la creciente certeza de que la Reserva Federal no recortará su principal tasa de interés en noviembre. El billete verde prolongó su avance frente al euro, la libra esterlina y el yen, además de frentar el repunte del oro, por lo que el metal precioso está afianzando su posición en torno al máximo absoluto previamente alcanzado.

Los precios del crudo Brent intentaron consolidarse por encima de USD 76 por barril, si bien no lo consiguieron. La revalorización vista previamente durante esta semana se vio impulsada por las expectativas de que Israel lleve a cabo un ataque de represalia contra Irán. La situación cambió tras la publicación de los datos sobre reservas de petróleo en EE. UU., que reflejan un incremento de 1,64 millones para la semana, frente al aumento previsto de tan solo 300.000.

Alemania. Crecimiento del PIB

La economía germana es la más importante dentro de la Eurozona, por lo que durante mucho tiempo ha actuado como motor para la totalidad del bloque monetario. No obstante, los cambios en las cadenas de suministro y el creciente precio de los recursos energéticos y del costo de los materiales han provocado un efecto de desindustrialización en el país. Algunas empresas han comenzado o trasladar su producción al extranjero, lo que ha afectado al PIB, el cual lleva bastante tiempo disminuyendo. Los analistas internacionales esperan que el indicador siga arrojando datos negativos. La debilidad económica es el motivo por el que el Banco Central Europeo está considerando otro ciclo de recortes de las tasas, lo que resulta negativo para el euro. Ante tal escenario, el par EUR/USD podría retroceder hasta 1,0670.

EE. UU. Tasa de crecimiento del PIB

La economía de la primera potencia mundial exhibe una estable tasa de crecimiento, y el hecho de que la Fed haya reducido sus tipos supone un respaldo adicional para estimular su avance. Analistas globales esperan que el PIB vuelva a subir y que el ritmo de crecimiento se acelere. Esto crearía un escenario positivo para el billete verde, en tanto permitiría al regulador estadounidense interrumpir la flexibilización de su política monetaria durante su reunión en noviembre. De ser así, el par USD/JPY podría seguir creciendo hasta 153,00.

EE. UU. Nóminas no agrícolas

Los indicadores del mercado laboral resultan sumamente importantes para una economía tan orientada a los servicios como es la estadounidense. La situación laboral en el país de las oportunidades no ha dado por el momento motivos para preocuparse: la tasa de desempleo viene cediendo durante los tres últimos meses, y la economía continúa creando nuevos puestos de trabajo. No obstante, los analistas internacionales esperan que la tasa de desempleo se incremente y que se reduzca la cifra de nuevos puestos durante el periodo de publicación de informes. El deterioro de estos indicadores, a los que la Fed da prioridad junto con la inflación en el momento de tomar decisiones sobre sus tasas de interés, aumentará las expectativas de que se decrete un nuevo recorte de las tasas antes de que termine el año. Esto sería pernicioso para el billete verde, pero beneficioso para el oro, activo denominado en dólares, por lo que el par XAU/USD podría retomar su revalorización hacia el nivel de 2.750,00.


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