• Se estima una tasa de variación de 0.0% mensual para diciembre.
• La industria habría caído 0.2% m/m ante la debilidad en las cadenas de valor.
• Los servicios subieron solo 0.1% m/m, pero el comportamiento en el año es negativo.
De continuar esta dinámica, la economía crecería cerca de 6.0% en 2021
El INEGI publicó la estimación obtenida a partir del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) para diciembre. La variación anual (a/a) real de la economía sería de -0.2% y la mensual (m/m) de 0.0%, lo que constituiría un mal cierre de año para la economía pues el nivel de 108.0 puntos que el índice habría registrado en diciembre sería idéntico al de enero de 2021. Además, dado que el cuarto trimestre inició con una caída, el estancamiento del último mes del año amplía significativamente las probabilidades de que la variación trimestral del PIB sea negativa por segundo periodo consecutivo, pues en el 3T-21 la baja fue de 0.4%. Así, las cifras apuntan a que la economía de nuestro país ha entrado en una dinámica recesiva dentro del ciclo recesivo mayor ocasionado por el surgimiento inicial del Covid-19, lo que podría deteriorar el marco para la recuperación y sesgar a la baja los pronósticos de crecimiento para 2022.
La industria habría caído 0.2% m/m ante la debilidad en las cadenas de valor
El comportamiento que se observaría en el mes habría estaría relacionado a la rápida propagación de la variante Ómicron a través de una debilidad marcada en la oferta de mano de obra y de una mayor cautela por parte de los consumidores. Los datos para Estados Unidos ya mostraron que la producción manufacturera no fue resiliente ante el primero de dichos efectos, por lo que se entiende que la industria en México presente una caída de 0.2% m/m en diciembre. Con este resultado, el sector secundario de la economía habría avanzado en cerca de 7.7% durante 2021 luego de una caída cercana al 10.0% en el año previo.
Los servicios subieron solo 0.1% m/m, pero el comportamiento en el año es negativo
Sobre los servicios, el desempeño en diciembre habría sido de estancamiento (+0.1% m/m), aunque la tasa anual de -1.3% refleja que, luego del rebote inercial tras el cierre de las actividades, 2021 ha sido un año de deterioro más que de recuperación. De concretarse el pronóstico, los servicios habrían tenido un avance de 4.6% en todo el año, lo que los dejaría a casi 4.0% de distancia respecto al volumen de la actividad en 2019, aunque la situación podría agravarse durante enero de 2022 que está siendo el mes de mayores contagios en nuestro país.
Rumbo Económico
Los últimos meses han supuesto un cambio de condiciones importante para el acontecer económico. El alza en las tasas de interés, el desgaste acumulado del consumo y la incertidumbre en los frentes de salud, política y economía abonan a un panorama de crecimiento más retador. Ante ello, pensamos que el sesgo sobre nuestros pronósticos de +5.5% para el PIB de 2021 y de +2.7% para el de 2022 se inclinan a la baja, por lo que estaremos revisando nuestros estimados. Tras la publicación del dato, el peso se ha depreciado en 0.35% frente al dólar y cotiza en $20.38.
