Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
CAD y NZD a la espera de la decisión sobre los tipos - ¿Qué esperar?
La brusca disminución del rendimiento de los bonos del Tesoro ha hecho descender el dólar con USD/JPY. Estados Unidos no ha publicados ningún informe relevante y no ha habido declaraciones de funcionarios de la Reserva Federal, lo que nos deja el descenso de los valores y las materias primas como primer motor del debilitamiento del USD/JPY.
Sin embargo, los valores de Estados Unidos cerraron la jornada apartándose de mínimos, lo que limitó las pérdidas del par. Seguimos creyendo que el dólar se verá fortalecido tras la reunión del FOMC de marzo. El repunte de los precios de las materias primas, la recuperación de los valores de Estados Unidos y la mejora de los datos de Estados Unidos dan a la Fed muchas razones para mantener una postura agresiva en cuanto a la política monetaria. Aunque nadie habla de la posibilidad de que las orientaciones vayan a ser agresivas, eso podría cambiar la semana que viene, a la espera de la reunión del FOMC.
Mientras, tenemos dos anuncios sobre política monetaria en las próximas 24 horas. El primero será el del Banco de Canadá. Si echamos un vistazo a la tabla que mostramos a continuación, se ha experimentado una gran mejora de la economía canadiense desde la última reunión de política monetaria. La inflación ha subido, las licencias de obra han aumentado bruscamente, la economía se ha expendido según los datos del PIB, la actividad manufacturera ha ascendido y el déficit comercial se ha reducido.
Y lo que es más importante: los precios del petróleo han subido un 27%, dando esperanzas al Banco de Canadá de que puede que los precios de las materias primas hayan tocado fondo.
No obstante, no han sido todo buenas noticias, pues las ventas minoristas y la actividad del mercado laboral han disminuido aunque los responsables de la política monetaria se han mantenido optimistas durante el desplome del petróleo y creemos que la reciente recuperación no hará más que afianzar su optimismo. La última vez que se reunió el Banco de Canadá, el gobernador Poloz expresó poca preocupación acerca de una posible recesión global y aunque no va a gustarles nada que suba el CAD, se sienten animados por la resistencia y la flexibilidad de la economía. Así, creemos que el tono del anuncio sobre política monetaria de mañana será positivo para el dólar canadiense.
El Banco de la Reserva de Nueva Zelanda también tiene menos de lo que preocuparse en marzo de lo que tenía en enero. La siguiente tabla indica una mejora del consumo, de la actividad del mercado laboral, de la actividad empresarial y de la inflación.
Aunque la remuneración media por horas ha descendido, los precios de la vivienda han bajado y la confianza empresarial y de los consumidores ha disminuido, la mejora es suficiente como para que el Banco de la Reserva mantenga sus tipos de interés inalterados. Puede que dejen la puerta abierta a más medidas de relajación pero la reciente subida del AUD/NZD reduce la presión que se ejerce sobre el banco para que relajen la política monetaria. Así que el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda no supone una amenaza para el dólar neozelandés.
No obstante, las tres divisas vinculadas a las materias primas, incluido el dólar australiano, han perdido posiciones hoy tras los poco alentadores datos comerciales de China. Como ha dicho nuestro colega Boris Schlossberg, los datos comerciales de China:
“han resultado considerablemente peores de lo previsto: 35.590 millones frente a los 51.000 previstos, pues las exportaciones han caído la friolera de un 25% y las importaciones un 13,8%. Los mercados no se han inmutado porque estas cifras están algo desviadas por el Año Nuevo Chino, pero la complacencia de los inversores podría tornarse en preocupación si los datos de la semana que viene no mejoran. Este es el segundo mes consecutivo que tanto las exportaciones como las importaciones experimentan descensos de dos dígitos y esto indica que el crecimiento de China se está ralentizando claramente. La presión para devaluar el yuan aumentará muchísimo si las cifras comerciales no mejoran en marzo y eso podría causar más turbulencias en los mercados financieros. El reciente aumento del riesgo y el repunte de las materias primas se han basado mayormente en el supuesto de que la economía china se ha estabilizado, pero no hay nada en las cifras comerciales de hoy de lo que pueda sacarse tan optimista conclusión”.
En respuesta, no sólo han bajado las divisas vinculadas a las materias primas sino que los precios de las materias primas han descendido también.
El euro sigue ampliando ganancias a la espera de la reunión sobre política monetaria del Banco Central Europeo. En este punto, que el euro siga bajando depende del resultado de la decisión sobre política monetaria.
Aunque puede que los inversores hayan descartado un recorte de los tipos de la facilidad de depósito de 10 pbs, hay otras acciones que el BCE podría tomar para devaluar el euro. Esto incluye aumentar la cantidad de activos adquiridos al mes, ampliar la fecha límite de compra de bonos e introducir préstamos condicionados a largo plazo. Los analistas prevén una ampliación del programa de expansión cuantitativa de cualquier punto desde cero hasta 20.000 millones de euros, de modo que hay mucho margen para las sorpresas. Además, Mario Draghi podría hablar de tomar más medidas el año que viene, lo que podría también afectar a la actuación del euro.
Tras seis jornadas consecutivas de avance, la libra finalmente ha descendido. El Reino Unido no ha publicado informes económicos hoy pero, después de afirmar que el siguiente movimiento de los tipos debería ser al alza, Martin Weale, miembro del comité de política monetaria del Banco de Inglaterra, ha apuntado también que podrían recortar los tipos y reactivar el programa de expansión cuantitativa si fuera necesario. Puede que el repunte del par GBP/USD haya llegado a su fin antes del EMA de 50 días. El Reino Unido publicará mañana sus cifras de producción industrial y el descenso del PMI del sector manufacturero indica que el informe será más flojo.