De acuerdo al reporte publicado hoy por el INEGI la confianza del consumidor en junio presentó una reducción de 2.4% anual ubicando al índice total en 93.3pts. La cifra de junio resultó por debajo tanto de nuestro estimado de 94.5 puntos como del estimado del consenso de 95.4 puntos. Con ello, la confianza del consumidor suma tres meses en contracción. Al interior, se observó una caída en todos sus componentes. En particular, destaca la disminución de 3.4% anual que registró el rubro que hace referencia a la adquisición de bienes duraderos. En este contexto, cabe destacar que este componente suma 4 meses consecutivos en contracción. En nuestra opinión, la reducción que ha presentado este componente se explica principalmente por el alza que ha presentado la inflación general en los últimos meses, ya que guarda una fuerte correlación inversa con la trayectoria de la inflación (referirse a la primera gráfica de la siguiente página).
Por su parte, las expectativas de los consumidores en relación a la situación presente y futura del país registraron una caída de 0.1% y 3.7% anual, respectivamente; mientras que la expectativas respecto a la situación presente y futura de los hogares se redujeron en 2.8% y 2%, respectivamente. En este contexto, consideramos que la desaceleración que ha presentado el mercado laboral, la demanda interna y el sector exportador mexicano han incrementado la percepción entre los consumidores de que probablemente la economía mexicana no presentará un mayor dinamismo en los próximos meses, lo cual vio reflejado en el retroceso de las expectativas en relación a la situación futura de los hogares y del país.
Las cifras ajustadas por estacionalidad mostraron una contracción de 1.9%m/m, ubicando al índice total en 93.4 puntos. La reducción mensual observada en el indicador se explicó gracias a una caída generalizada en sus componentes. En este contexto, cabe destacar que las expectativas de los consumidores en relación a la situación económica actual y futura del país presentaron una reducción de 2.2% y 2.9% mensual, respectivamente. Por su parte, las expectativas en torno al desempeño actual y futuro de los hogares registraron una disminución de 1.4% y 1% m/m, respectivamente. Finalmente, el componente que hace referencia a la posibilidad de adquisición de bienes duraderos exhibió una caída de 1.6% mensual. En este contexto, es importante destacar que dentro los primeros seis meses del año, la confianza del consumidor se ha contraído en cinco ocasiones.