El peso chileno seguía depreciándose en la sesión del miércoles, con un fuerte avance del tipo de cambio y con una ruptura de la barrera de los $640 ante un menor apetito por riesgo en los mercados internacionales.
La moneda local se encamina a cerrar la primera mitad del año con una baja superior al 4%, arrastrada por el retroceso en el precio del cobre y la escalada en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
En la medida que los riesgos hacia la región comiencen a disiparse y se cumplan pronósticos de menores tensiones comerciales, además de un repunte en el precio del cobre, aumentaría la llegada de divisas al país para llevar el tipo de cambio a entre 605 y 620 unidades, según analistas.
Sin embargo, en el corto plazo la divisa norteamericana podría subir en busca de la próxima resistencia en la zona de los $660 y posteriormente en la zona de los $675.
Los indicadores técnicos RSI y MACD, en el gráfico de cierres semanales, siguen operando al alza y con espacio para nuevos avances, por lo que esperamos una mayor presión alcista mientras la paridad USD/CLP siga operando por sobre la barrera de los $640.
