La mayoría de los mercados bursátiles en el mundo cerraron este jueves en números rojos. La caída de los índices en Estados Unidos se les atribuyó a las cifras de inflación al productor que reportaron arriba de estimados, con un aumento de 0.6% mensual y 1.6% anual, ambos por arriba de los registrados en enero y los estimados para febrero, en 0.3% y 1.1%, respectivamente. También, los precios subyacentes estuvieron por arriba de las estimaciones del mercado, confirmando la presión que mostró la inflación general en días pasados.
Los tres principales índices de Wall Street cerraron este jueves con pérdidas promedio de 0.31%, dentro del proceso de consolidación que iniciaron hace varios días, por lo que sus principales indicadores técnicos están mixtos, pero siguen arriba de sus respectivos promedios móviles de un mes, los cuales quedan como el primer soporte que hay que vigilar.
El Dow Jones cerró en 38,906 arriba de su promedio móvil de un mes en 38,818, el S&P-500 cerró en 5,150.5 y su promedio móvil en 5,078, y el Nasdaq que cerró en 16,129 está arriba del promedio móvil ubicado en 15,993.
En México, el índice S&P/BMV IPC volvió a subir, cerrando en 56,059, con ganancia de 0.38%, aunque en operaciones intradía alcanzó máximos de 56,427, con lo que llegó a superar su promedio móvil de un mes ubicado en 56,127, que en caso de cerrar arriba podría buscar un primer objetivo en 57,300 puntos. Sus principales indicadores técnicos quedaron con señales positivas.
El tipo de cambio cerró en $16.69, con dos centavos arriba del cierre previo, ubicándolo con una sobre valuación respecto al dólar, mayor al 17.0%, medido por diferenciales de inflación entre EUA y México con base en 1996. Sin embargo, ante la posible baja de tasas de interés a partir de la semana entrante, y la apreciación de 0.58% que tuvo el dólar según el índice DXY, podría regresar a los $17.00 en un primer objetivo.