La apreciación del peso mexicano se ha dificultado, mientras que la depreciación gana impulso y el tipo de cambio comienza la semana cerca de 20 pesos por dólar. Los desarrollos políticos actuales y una inclinación creciente hacia Donald Trump han generado una presión considerable que parece impulsar la depreciación del peso.
El peso mexicano, conocido recientemente como el "superpeso", ha mostrado una fortaleza notable en los últimos años. Sin embargo, este escenario podría cambiar drásticamente debido a dos factores externos clave: las decisiones de la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) y la posible reelección de Donald Trump.
¿Qué influirá más en el superpeso, la FED o la potencial reelección de Trump? La FED ejerce un impacto importante en el valor del dólar. Si la FED incrementa o mantiene altas las tasas de interés, el dólar suele fortalecerse y esto tiende a debilitar a otras divisas, como el peso mexicano.
La gestión de la inflación y la preservación de la estabilidad económica obliga a la Reserva Federal a adoptar medidas que pueden provocar oscilaciones en los mercados de divisas, incidiendo así en la valoración del peso mexicano.
La inflación parece dirigirse hacia el objetivo fijado por la Reserva Federal, lo que junto a la preocupación por una posible recesión, podría abrir la posibilidad de una reducción en las tasas de interés.
Las proyecciones indican que la FED podría cambiar su política monetaria y el mercado de bonos ya descuenta una reducción de tasas antes de terminar el año. Pero todo dependerá de la evidencia que dejen los datos económicos al respecto.
Adicionalmente, las encuestas en EE.UU. favorecen una eventual reelección de Donald Trump. Sus políticas proteccionistas han tenido un impacto adverso en varias economías, incluida la mexicana, lo cual podría afectar la cotización del "superpeso".
Una nueva elección de Trump podría avivar políticas previas, provocando más incertidumbre y alteraciones en los mercados financieros de América Latina.
Las acciones y políticas de Trump han impactado previamente en los mercados de divisas. Si Trump gana, se podría desatar mayor inestabilidad y una potencial caída del peso mexicano ante la inseguridad sobre sus futuras políticas comerciales y de inmigración.
La política monetaria de la FED y la posible reelección de Trump, tienen el potencial de influir significativamente en el valor del peso mexicano. Mientras la FED podría debilitar el dólar y fortalecer al peso con sus decisiones de tasas de interés, una victoria de Trump podría generar incertidumbre y volatilidad en los mercados latinoamericanos.
Estos eventos recientes, dejan el "superpeso" enfrentando un futuro incierto, de modo que los próximos meses serán cruciales para determinar su trayectoria.
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