Las acciones cerraron el miércoles con retrocesos en la bolsa de Nueva York, con una caída en los precios del petróleo que pesó sobre el sector de energía del S&P 500, que bajó un 1 por ciento, liderando las pérdidas del S&P 500.
El promedio industrial Dow Jones perdió 48,5 puntos, o un 0,28 por ciento, a 17.168,61 unidades, mientras que el S&P 500 cayó 11,83 puntos, o un 0,58 por ciento, y terminó en 2.018,94 unidades. El Nasdaq Composite perdió 40,86 puntos, o un 0,84 por ciento, a 4.840,12 unidades.
Mientras, los títulos del grupo de automóviles de lujo Ferrari (N:RACE) avanzaron un 5,8 por ciento en su debut en Wall Street.
Tras una fuerte caída iniciada a mediados de agosto, el índice S&P 500 encontró una importante zona de soporte en los 1.880 puntos, gatillando nuevas órdenes de compra que han impulsado al índice accionario sobre la zona de los 2.000 puntos.
En estos momentos, el índice S&P 500 se encuentra testeando una importante barrera técnica representada por la zona de los 2.040 puntos (media móvil simple de 60 semanas, por lo que un fuerte avance por sobre dicho nivel debería impulsar a las acciones de EEUU en busca de sus máximos del año en torno al nivel de los 2.130 puntos.