Los precios de los bonos en varios países, y particularmente en Estados Unidos y México volvieron a caer el miércoles, y por tanto, los rendimientos tuvieron alzas importantes. En EUA, los treasuries de 10 año subieron su rendimiento de 1.398% a 1.484%, mientras que en México el M27 subió de 5.36% a 5.41% en el día. Los movimientos en los bonos no tienen un claro catalizador, aunque el mercado lo atribuye al alza de la inflación ante la expectativa de que la economía se vaya recuperando, lo cual traería mayores costos en los préstamos de largo plazo.
La expectativa de mayor crecimiento económico en Estados Unidos también está influyendo en el mercado accionario, ya que los inversionistas prefieren dejar a un lado las acciones tecnológicas y tomar las que se pueden ver favorecidas con el crecimiento económico. Por consecuencia, los tres principales índices cerraron el miércoles con una pérdida promedio de 1.47%, destacando la caída de 2.70% del índice Nasdaq, mientras que el DJI-30 solo perdió 0.39%. Sin embargo, para este jueves se espera un discurso del presidente de la Reserva Federal, donde probablemente reiterará que los estímulos monetarios se mantendrán hasta 2023 o 2024, pero habrá que ver si el mercado le cree. También, habrá que esperar la decisión del Senado de Estados Unidos sobre el paquete de ayuda.
En México, la Bolsa medida por el índice S&P/BMV IPC acumuló cuatro jornadas seguidas de ganancias, con los que alcanzó máximos intradía de 46,481 puntos, logrando el primer objetivo marcado alrededor de los 46,500 puntos, aunque al cierre quedó en 46,377 puntos, con una ganancia de 1.52%.
En el mercado de divisas, el tipo de cambio volvió a presionarse en línea con otras monedas emergentes, aunque el peso mexicano fue el más castigado al cerrar su cotización en $20.99 con pérdida de 1.83%, mientras que el dólar volvió a fortalecerse frente a la mayoría de las monedas.