Confían en que reforma clave de México se pueda aprobar este año

Agustín de Gracia

México, 12 nov (EFE).- El gobierno y el primer partido de la oposición de México creen que aún existe la posibilidad de que el Parlamento apruebe este año una reforma clave del sector energético, a pesar de que la izquierda piensa que no será posible.

La iniciativa, presentada por el Gobierno de Enrique Peña Nieto en agosto pasado, permite cierta liberalización del sector, ahora dominado por el monopolio de la empresa pública Petróleos Mexicanos (Pemex), pero está encontrando fuertes resistencias políticas.

La necesidad de que se cambien dos artículos de la Constitución para poder aplicar esa reforma obliga al gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) a negociar con otras fuerzas para completar los dos tercios necesarios en el Parlamento.

Por ello, considerando las tareas legislativas que están pendientes, la izquierda ya viene manejando la posibilidad de la reforma energética sólo va a ser debatida el año próximo, algo en lo que no está de acuerdo el Gobierno.

"La idea es que se vea en este período", afirmó hoy el secretario Gobernación de México, Miguel Ángel Osorio Chong, el ministro más poderoso del gabinete de Peña Nieto.

Los tiempos son estrechos, porque primero debe debatirse la reforma en el Senado y después en la Cámara de Diputados, y el período legislativo ordinario se cierra a mediados de diciembre.

A pesar de que la reforma energética es, hasta ahora, la iniciativa más importante presentada por Peña Nieto, el Gobierno ha tenido que ceder ante las demandas de la oposición para que antes se apruebe una reforma política-electoral que está en debate.

Esa postura ha sido defendida especialmente por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), que gobernó en México desde el año 2000 hasta diciembre pasado y que viene impulsando una reforma energética propia más liberalizadora que el proyecto del Gobierno.

"Para poder aspirar a un desarrollo económico sostenido y sustentable, también son necesarias reformas de contenido político", dijo hoy a Efe el senador del PAN Jorge Luis Lavalle, integrante de la comisión de Energía de la cámara alta.

Los tiempos, según Osorio y Lavalle, permiten que en los próximos días se pueda cerrar la reforma política-electoral, que, entre otros temas, busca una modernización del sistema electoral, por lo que el camino quedaría libre para discutir la reforma energética.

Según Lavalle, la discusión en el tema energético ya está avanzada, porque ha habido varios foros en los que se ha analizado la iniciativa en los que ha habido "enormes coincidencias de todos los actores" involucrados en el sector.

"Sí hay tiempo como para poder sacarla este año", insistió el senador.

La izquierda, sin embargo, cree que no es así, por la "apretadísima" agenda legislativa, según dijo hoy el líder del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, y por la necesidad de imprimir "prudencia y tranquilidad" a este tema.

Pero, una vez superado en los próximos días el escollo de la aprobación de la reforma político-electoral, el debate que se planteará es qué reforma energética se analizará, si la presentada por el Gobierno o los proyectos alternativos del PAN y del PRD.

Las posiciones más próximas son las del Gobierno y del PAN. Este último partido pide una liberalización del sector mayor que la de Peña Nieto, que incluya, por ejemplo, concesiones para compartir la producción de hidrocarburos entre el Estado y la iniciativa privada.

El Gobierno, en cambio, propone contratos de utilidades compartidas, reservándose el Estado la explotación de los recursos naturales; el PRD, cambio, rechaza cambios constitucionales y que la iniciativa privada ingrese al sector de hidrocarburos.

"Más allá de cuándo salga, es qué reforma energética" se va a analizar, insistió Lavalle, que calificó como "corta" y "limitada" la propuesta del Gobierno.

En los últimos días se han mencionado supuestos arreglos entre el Gobierno y el PAN para acordar una reforma energética más amplia, algo que han desmentido las dos partes, que insisten en que la discusión se está llevando a cabo, públicamente, en el seno del Parlamento.

"No ha habido ningún tipo de acuerdo", insistió hoy Lavalle.

La izquierda ha mencionado también la posibilidad de arrastrar hacia su postura a legisladores del PAN para que no se consigan los dos tercios necesarios para los cambios constitucionales, una posibilidad que, de confirmarse, pondría en aprietos al Gobierno.

Lavalle, sin embargo, consultado sobre si se mantendrá la disciplina de voto en el PAN, asegura que "la gran mayoría" de los legisladores de ese grupo apoya la reforma energética que impulsa ese partido. EFE