por Kenia Arteaga
(Actualiza con detalles adicionales del comunicado del Banco de México)
Infosel, marzo. 28.- La junta de gobierno de Banco de México cumplió con las expectativas del consenso de los analistas y optó por mantener su tasa de interés de referencia en un nivel de 8.25%, debido al entorno de marcada incertidumbre que enfrenta la inflación.
Los cinco integrantes del cuerpo colegiado responsable de dictar la política monetaria del país tomaron esa decisión por unanimidad.
"Considerando que la evolución reciente de la inflación y de sus principales determinantes no presentan cambios significativos respecto a las trayectorias previas, que la posición cíclica de la economía ha mostrado cierto relajamiento, y que la postura de política monetaria actual es congruente con la convergencia de la inflación a su meta, la Junta de Gobierno ha decidido por unanimidad mantener el objetivo para la tasa de interés", dijo el Banco Central, en su comunicado. Aún "persiste un balance de riesgos al alza para la inflación respecto a su pronóstico, en un entorno de marcada incertidumbre".
El Instituto Central observó que la actividad económica en el país mantiene un sesgo a la baja y continuó desacelerándose a inicios de este año, mientras que los mercados financieros locales han observado un buen desempeño.
Algunos analistas no descartaban que Banco de México diera un toque dovish a su comunicado y dejara abierta la puerta a un cambio en ciclo de las tasas de interés locales, algo que aparentemente no ocurrió.
En la jerga económica se conoce como dovish a los comunicados de política que muestra mayor preocupación por la debilidad de la economía que por la evolución de la inflación y, generalmente, son más proclives a preferir tasas de interés más bajas.
Si bien la inflación logró posicionarse dentro del llamado rango de confort del banco central --que está entre 2 y 4%--, los funcionarios responsables de dictar la política monetaria en México optaron por no ajustar las tasas debido a que las expectativas de largo plazo de la evolución del índice de precios al consumidor continúan consistentemente por arriba de 3%.
"En suma, si bien se han intensificado algunos de los factores de riesgo a la baja, se mantienen otros que la podrían presionar al alza en mayor magnitud y desviarla de la trayectoria prevista", agregó el banco central, en su comunicado.
La decisión era ampliamente esperada por el consenso de analistas de bancos y casas de bolsa, quienes de acuerdo con un sondeo elaborado por Infosel estimaban de forma unánime que el Banco de México elegiría dejar los tipos de interés en el país sin cambios.