Por Geoffrey Smith
Investing.com -- El número de personas que solicitaron prestaciones por desempleo tras haber sido despedidas subió la semana pasada al nivel más alto en cuatro semanas, pero se mantuvo en un nivel históricamente bajo.
Las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo subió a 196,000 desde 183,000 la semana anterior, dijo el jueves el Departamento de Trabajo. Esta cifra fue ligeramente superior a las 190,000 esperadas, pero sigue dejando la media de cuatro semanas de nuevas solicitudes de subsidio por desempleo en el nivel más bajo de los últimos ocho meses, 189,250.
Las solicitudes de subsidio por desempleo continuado también se situaron ligeramente por encima de lo esperado, en 1.688 millones, 38,000 más que la semana anterior.
Las cifras ponen uno de los grandes valores atípicos en los datos económicos de EE.UU. un poco más en línea con otros signos de desaceleración, pero es poco probable que cambie la percepción de que el mercado de trabajo sigue siendo fuerte, con un montón de vacantes para los recién despedidos a tomar.
Las ofertas de empleo volvieron a superar los 11 millones en diciembre, según la última encuesta mensual del Departamento de Trabajo, mientras que el informe del mercado laboral de enero reveló que el mercado laboral se había mantenido más fuerte de lo que parecía a finales del año pasado, el Departamento de Trabajo elevó su estimación del empleo total no agrícola en más de medio millón.
"Aunque los últimos datos muestran un modesto repunte en el nivel de solicitudes de subsidio de desempleo, el aumento se produce a partir de un nivel moderado y las solicitudes siguen indicando un mercado laboral tenso a pesar de los despidos que han acaparado los titulares en las últimas semanas", escribió Matthew Martin, de Oxford Economics, en una nota a los clientes. En su opinión, los datos demuestran que aún queda "mucho impulso en el mercado laboral" y que la Reserva Federal sigue en camino de elevar de nuevo el rango objetivo de los fondos federales en marzo.
La Fed ha insistido repetidamente en la anormal rigidez del mercado laboral desde el desvanecimiento de la pandemia para justificar un agresivo ciclo de endurecimiento de la política, que ahora ha llevado las tasas de nuevo al 4.75%. Los funcionarios de la Fed siguen indicando que esperan al menos una subida más antes de pausar ese ciclo.