BUENOS AIRES, 4 mar (Reuters) - El Congreso de Argentina, dominado por la oposición, inició el viernes la discusión para derogar dos leyes que impiden al país cancelar deuda impaga como acordó esta semana en Estados Unidos con los fondos conocidos como "holdouts", un paso clave para retornar a los mercados internacionales de crédito.
Además de la derogación de las leyes que impiden realizar los pagos prometidos, el Parlamento deberá aprobar el acuerdo por 4.653 millones de dólares que pondría fin a una disputa de 14 años y le permitirá al país retomar el crecimiento de una economía estancada y que sufre una alta inflación. martes, el presidente de centroderecha Mauricio Macri, que asumió en diciembre, pidió al Congreso que apruebe el acuerdo, pero la faena no será sencilla para el Gobierno, ya que el peronismo que dejó el poder tiene el control del Senado y posee una amplia bancada en la Cámara de Diputados.
"Esta fue una negociación con profesionales de la usura que tenían todas las reglas a su favor. Creemos que hay que resolverlo pronto (...) La decisión es del Congreso", dijo el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, en su presentación del proyecto a los diputados.
El proyecto podría ser aprobado el martes por las comisiones de Finanzas y de Hacienda y Presupuesto de Diputados y luego debería ser votado en el pleno de la Cámara baja, donde varios opositores moderados dijeron que apoyarían el proyecto tras analizarlo.
Sin embargo, una fracción del peronismo, que responde a la ex presidenta Cristina Fernández, ya mostró su rechazo al proyecto, mientras que otros diputados del mismo partido dijeron que podrían aprobar el proyecto tras debatirlo.
En el Senado se espera la batalla más ardua, ya que es controlado por el peronismo. La gestión de Macri apuesta allí a que los legisladores cedan ante las dificultades financieras que atraviesan muchas de las provincias que representan, que podrían necesitar fondos que dependen del Gobierno nacional.
El Congreso debe aprobar el acuerdo con los acreedores antes del 14 de abril, fecha límite establecida por el tribunal de Nueva York donde se cerró el trato para realizar el pago a los fondos conocidos como "holdouts". (Reporte de Gabriel Burin, escrito por Nicolás Misculin. Editado por Javier Leira)