En julio, el sector servicios chino experimentó un repunte del crecimiento, impulsado por un aumento de los nuevos pedidos, según indica el último índice de gestores de compras (PMI) de servicios Caixin/S&P Global.
El PMI de servicios subió a 52,1, frente a 51,2 en junio, marcando el 19º mes consecutivo de expansión del sector. Este índice, que refleja predominantemente el comportamiento de las empresas privadas y orientadas a la exportación, sugiere crecimiento cuando se sitúa por encima del umbral de 50.
La tendencia positiva observada en el PMI Caixin contrasta con los datos oficiales del PMI de servicios, que indicaron un estancamiento del sector en el mismo periodo. Las ventas al por menor, los servicios del mercado de capitales y los servicios inmobiliarios fueron algunos de los sectores que se contrajeron según el PMI oficial.
A pesar del crecimiento general de los servicios, el ritmo de la demanda exterior se ha ralentizado, alcanzando su menor expansión desde agosto de 2023. Los proveedores de servicios tuvieron que hacer frente al aumento de los costes asociados a las materias primas, los salarios y los fletes. Sin embargo, el empleo dentro del sector experimentó su aumento más rápido en 11 meses.
La encuesta Caixin/S&P también informó de que el PMI compuesto, que incluye los sectores de servicios y manufacturas, mostró un ligero descenso con respecto a junio, pero se mantuvo por encima de la marca de 50 puntos, lo que indica una expansión continuada.
El economista senior de Caixin Insight Group destacó que, aunque los precios del nivel compuesto se mantuvieron débiles, sobre todo en el frente de las ventas, esta tendencia está ejerciendo presión sobre los beneficios de las empresas.
En respuesta a los retos económicos, los dirigentes chinos han indicado que las ayudas fiscales para lo que queda de año se concentrarán en estimular el consumo. El objetivo es aumentar los ingresos y el bienestar social, un cambio estratégico recomendado desde hace tiempo por los economistas, que argumentan que el modelo económico chino depende demasiado de la inversión.
Los economistas de Citi, sin embargo, han expresado su cautela, sugiriendo que los niveles de confianza pueden seguir siendo bajos en los próximos meses si no se abandona el actual modo de flexibilización reactivo e incremental. También anticipan que hasta el año que viene no se adoptarán medidas de estímulo interno más significativas, ya que el país podría enfrentarse a retos económicos externos más fuertes.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.