BOGOTÁ, 22 jul (Reuters) - El Gobierno de Colombia y los camioneros llegaron el viernes a un acuerdo para suspender una huelga de 45 días, la más larga y costosa de los transportistas en la historia del país, que provocó trastornos en el comercio exterior, además de escasez y alzas en los precios de los alimentos.
Los transportistas, que comenzaron el cese de actividades el 7 de junio, lograron una actualización vigilada de los costos en las tarifas de carga y cambios en programa para sacar de circulación los camiones viejos y obsoletos, aunque el Gobierno no accedió a reducir las tarifas de los combustibles y de los peajes, una de las principales exigencias.
"Se levanta la inmovilización del transporte de carga", dijo a periodistas el ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas.
El presidente de la Asociación de Transportadores de Carga, Orlando Ramírez, afirmó que la huelga se levanta porque se logró un acuerdo que "satisface las necesidades" del sector.
En Colombia existen unos 330.000 camiones que mueven la mayor parte de las importaciones y exportaciones desde y hacia los principales puertos sobre el Caribe y el Pacífico.
En Buenaventura, el principal puerto colombiano sobre el Océano Pacífico, se registró acumulación de carga y amenazas de que los buques no pudieran descargar los contenedores.
La huelga también podría provocar una sensible reducción de las exportaciones de café de Colombia a entre 600.000 y 700.000 sacos de 60 kilos en julio, desde la cuota mensual de unos 1,2 millones de sacos, de acuerdo con estimaciones del gremio.
Los analistas esperan que la inflación acelere en julio a un 0,25 por ciento, superior al 0,19 por ciento de igual mes del año anterior, de acuerdo con un reciente sondeo de Reuters, en gran parte por el alza de los precios de los alimentos como consecuencia de la huelga de los camioneros.
Colombia acumuló hasta junio una inflación anual de 8,60 por ciento, más del doble que la meta del banco emisor, de entre 2 y 4 por ciento, lo que ha llevado a la autoridad monetaria a subir la tasa de interés de referencia en un total de 300 puntos base durante los últimos 10 meses hasta un 7,50 por ciento.
Las expectativas del incremento de la inflación llevarían al Banco Central a realizar una nueva alza de su tasa, a un 7,75 por ciento, en la reunión de la próxima semana.
El efecto de la huelga, que provocó enfrentamientos de manifestantes con la Policía que dejaron un muerto, decenas de heridos y capturados, además de varias carreteras bloqueadas temporalmente, se había reducido en la última semana.
El Gobierno militarizó las principales carreteras del país con alrededor de 50.000 efectivos de las Fuerzas Armadas para cuidar caravanas de camiones que trasladaban alimentos y combustibles a algunas ciudades que registraban escasez.
Sin embargo, los principales gremios económicos estiman que el cese de actividades de los camioneros dejó pérdidas estimadas en unos 2 billones de pesos (689,6 millones de dólares). (Reporte de Luis Jaime Acosta y Nelson Bocanegra, editado por Gabriela Donoso)