El panorama de la pequeña empresa en Estados Unidos está experimentando un importante repunte, como pone de manifiesto un reciente informe del Tesoro estadounidense. El análisis indica un aumento sustancial de las solicitudes de creación de empresas este año, con una media de 430.000 nuevas solicitudes de negocio presentadas cada mes. Esta cifra representa un aumento del 50% en comparación con la media mensual de 2019, el último año antes de la pandemia de COVID-19 bajo la administración del entonces presidente Donald Trump.
El informe del Tesoro también destaca un notable aumento de las solicitudes para las empresas que tienen más probabilidades de aumentar su plantilla, con cifras mensuales que alcanzan las 140.000, lo que supone un aumento del 30% con respecto a los niveles de 2019. Desde ese año, las pequeñas empresas han sido responsables del 70% de los nuevos empleos netos en Estados Unidos, un salto desde el 64% del ciclo económico anterior.
Junto con la publicación de este informe, un funcionario de la campaña anunció que la vicepresidenta Kamala Harris propondrá una mejora significativa de las exenciones fiscales para las startups. El miércoles, se espera que revele un plan para aumentar la deducción fiscal de las pequeñas empresas del límite actual de 5.000 dólares para los costes de puesta en marcha a 50.000 dólares. Esta medida responde al coste medio de crear una empresa, que se sitúa en torno a los 40.000 dólares.
La Vicepresidenta Harris, en colaboración con la Secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, se ha centrado en ampliar los recursos de préstamo para las pequeñas empresas, especialmente en las comunidades minoritarias y desatendidas. Este esfuerzo incluye más de 8.000 millones de dólares en inversiones en 162 instituciones financieras comunitarias a través del Programa de Inversión de Capital de Emergencia, establecido durante la pandemia de COVID-19.
En una declaración, Harris hizo hincapié en el papel de las pequeñas empresas como base de la fortaleza de la comunidad y destacó el número histórico de nuevas solicitudes de pequeñas empresas, por un total de 19 millones, desde el inicio de la Administración Biden. También señaló el compromiso de la Administración de fomentar el crecimiento en zonas a menudo olvidadas y desatendidas.
El análisis del Tesoro revela además que la confianza de las pequeñas empresas ha seguido una trayectoria ascendente en los últimos meses, a medida que se han relajado las presiones inflacionistas. El Índice de Optimismo de la Pequeña Empresa, que mide las perspectivas de las empresas miembros de la Federación Nacional de Empresas Independientes, ha mostrado un repunte hasta alcanzar su punto más alto desde febrero de 2022. Del mismo modo, el Índice de la Pequeña Empresa de la Cámara de Comercio de EE.UU. ha alcanzado un máximo post-pandémico en el segundo trimestre de 2024.
El informe también señala que, si bien las estrictas condiciones de concesión de préstamos han planteado anteriormente retos para las pequeñas empresas, hay indicios de que las normas de concesión de préstamos están empezando a relajarse, lo que contribuye al creciente optimismo dentro del sector.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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