Los precios de consumo subyacentes en Tokio registraron un aumento interanual del 2,2% en julio, lo que supone una aceleración continua por tercer mes y alimenta las expectativas de que el Banco de Japón (BOJ) podría considerar una subida de los tipos de interés a corto plazo. Esta subida del índice de precios al consumo (IPC) subyacente, que excluye los costes volátiles de los alimentos frescos, estuvo en línea con las previsiones del mercado y se produce tras una subida del 2,1% en junio.
En una medida más amplia de la inflación, que también excluye el impacto de los precios del combustible, el índice subió un 1,5% en julio en términos interanuales, ligeramente por debajo del aumento del 1,8% de junio. Los datos de Tokio se siguen de cerca, ya que suelen preceder a las tendencias de la inflación a escala nacional.
El Banco de Japón, que en marzo puso fin a su prolongada política de tipos de interés negativos y a otras medidas monetarias expansivas, tiene previsto deliberar sobre la posibilidad de ajustar los tipos de interés durante su reunión de política monetaria de dos días, que concluirá el próximo miércoles. El banco central ha indicado que ahora es más plausible un avance sostenido hacia su objetivo de inflación del 2%.
El Gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, ha declarado anteriormente que el Banco Central está dispuesto a subir los tipos de interés desde sus actuales niveles próximos a cero si la inflación subyacente, que incluye el IPC y otros indicadores de precios más amplios, sigue avanzando hacia el objetivo del 2% según lo previsto. El Banco de Japón confía en que el aumento de los salarios haga subir los precios de los servicios y mantenga la inflación cerca del 2%, condición que ha establecido para seguir reduciendo su estímulo monetario.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.