TOKIO - Los últimos indicadores económicos apuntan a un aumento de la inflación subyacente del consumo en Japón, lo que mantendrá la presión sobre el Banco de Japón para que estudie la posibilidad de subir los tipos de interés. Una encuesta en la que han participado 18 economistas prevé que la inflación subyacente del consumo nacional, que excluye el coste de los alimentos frescos, suba al 2,7% en junio en tasa interanual.
Este repunte desde el 2,5% observado el mes anterior marca una tendencia continuada por encima de la tasa de inflación objetivo del 2% del Banco de Japón por 27º mes consecutivo.
El BOJ atribuye la persistente inflación en gran medida a factores externos, como el aumento del coste de las materias primas y las importaciones de combustible, agravado por la depreciación del yen.
El banco central ha hecho hincapié en la necesidad de un "ciclo de crecimiento virtuoso" en Japón, en el que los fuertes aumentos salariales vayan de la mano de una inflación y un gasto de los consumidores sostenibles.
En medio de estas presiones inflacionistas, el Banco de Japón, en su próxima reunión de política monetaria de los días 30 y 31 de julio, reevaluará sus previsiones de crecimiento del PIB e inflación. Algunos participantes en el mercado especulan con la posibilidad de que el Banco Central suba los tipos de interés en julio y reduzca la compra de deuda pública, lo que supondría un paso hacia la normalización de la política monetaria.
Esto seguiría los pasos iniciales del BOJ a principios de este año, cuando subió los tipos de interés en marzo por primera vez desde 2007.
Paralelamente a los datos de inflación, el Ministerio de Finanzas publicará el 18 de julio las cifras comerciales, que se espera reflejen una ralentización del crecimiento de las exportaciones y un déficit comercial persistente.
Las previsiones indican que las exportaciones probablemente crecieron un 6,4% en junio en tasa interanual, lo que supone un descenso significativo respecto al aumento del 13,5% registrado el mes anterior. Se prevé que el crecimiento de las importaciones haya aumentado un 9,3%, ligeramente por debajo del 9,5% de mayo, culminando en un déficit comercial de 240.000 millones de yenes (equivalentes a 1.510 millones de dólares).
Los datos que se publiquen próximamente proporcionarán una visión crítica de la salud económica de Japón y serán seguidos de cerca tanto por los responsables políticos como por los inversores a la hora de evaluar los posibles cambios en la política monetaria del Banco de Japón.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.