Por Walter Bianchi
BUENOS AIRES, 19 ago (Reuters) - Las compras del dólar para atesoramiento particular en Argentina, que el Gobierno mantiene restringidas para evitar una fuga de divisas, se han acelerado en agosto y están socavando las declinantes reservas del país con un bajo nivel de inversiones y una economía estancada.
Dos meses antes de las elecciones presidenciales, la cotización del dólar -que influye sobre una ya elevada inflación- y la estabilidad de la economía son clave para el plan de retener el poder del oficialismo, que ha recurrido a un intercambio de monedas con China para equilibrar las reservas del Banco Central.
En un mercado cambiario controlado férreamente por el Gobierno, las ventas limitadas de dólares a través del canal oficial tienen el fin de evitar una abrupta caída del peso en el mercado marginal, conocido como "blue". Pero los expertos consideran que esa política está llegando a un límite.
En lo que va de agosto, las compras particulares de dólares acumulan unos 507 millones de dólares, según datos de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), mientras que en julio sumaron 681 millones de dólares, en una constante alza desde los 456 millones registrados en enero.
"El dólar ahorro se financia con reservas del Banco Central, por lo que en una Argentina con déficit de cuenta corriente y sin acceso a los mercados internacionales de crédito, más dólar ahorro implica necesariamente menos reservas y deterioro de su balance", dijo en un reporte la consultora Economía & Regiones.
Desde que se implementó este régimen para la adquisición de dólares, en enero del 2014, se efectivizaron operaciones por unos 7.010 millones de dólares, que representan más del 20 por ciento de las reservas de la entidad monetaria.
En la primera semana del mes -hasta el 7 de agosto, según el último dato oficial- el Banco Central vendió 638 millones de dólares de sus reservas BCRA28 al mercado cambiario, una suma que comprende el total de operaciones de la plaza, incluyendo divisas para la importación de insumos, por ejemplo.
Las arcas del Banco Central argentino cuentan en la actualidad con unos 33.652 millones de dólares, un monto que apenas se ha reducido desde los 33.909 millones de dólares que poseía en abril, principalmente gracias al uso de fondos de un intercambio de monedas que el país firmó con China en el 2014.
En marzo del año pasado las reservas habían caído a 26.910 millones de dólares, aunque las divisas obtenidas a partir del canje con China, un bono emitido por la petrolera estatal YPF (BA:YPFD) y una licitación de frecuencias telefónicas permitieron mejorar el balance.
Sin embargo, muchos expertos ponen en duda cuál es el nivel real de las reservas del Banco Central, ya que el nivel oficial incluye bonos, encajes bancarios y deudas no canceladas.
El tema es particularmente sensible en un país que tiene un limitado acceso al mercado internacional de crédito tras la multimillonaria cesación de pagos que protagonizó en el 2002, y que usa las reservas para financiar importaciones y promover la actividad.
"Las reservas argentinas alcanzan para cubrir poco más de medio año de importaciones", señaló la consultora Ecolatina, que estimó que las reservas reales del Banco Central son actualmente de 12.741 millones de dólares. (Reporte de Walter Bianchi; editado por Ana Laura Mitidieri/Nicolás Misculin)