Investing.com – El Banco Central Europeo (BCE) celebra este jueves su reunión mensual de política monetaria, en la que tendrá un papel prominente la fortaleza del euro, que la semana pasada superó los 1,20 dólares por primera vez en dos años y medio.
Los expertos consideran que la aceleración del crecimiento de la eurozona y el repunte de los precios pueden avivar el debate sobre la retirada, a partir de 2018, de un programa de compra de activos de más de dos billones de euros.
Sin embargo, una inflación subyacente reducida y, sobre todo, la rápida apreciación de la divisa comunitaria frente al dólar –de casi el 14% este año-- permiten descartar cualquier movimiento de tipos de interés o una retirada brusca de los estímulos monetarios.
Los responsables del banco central estarán preocupados por la posibilidad de que el vigor de la moneda europea dañe a los exportadores y mine los esfuerzos de que la inflación crezca hasta la meta de una tasa cercana, aunque por debajo del 2%.
El plan de compra de activos expira a finales de 2017, pero las conversaciones formales sobre su futuro están sólo comenzando, por lo que es poco probable que la institución tome una decisión en el encuentro del jueves.
En este sentido, el mercado estima que la clave estará en los matices del mensaje de Mario Draghi. Analistas de Bakinter creen que sería razonable que el presidente de la autoridad monetaria se limite a modificar sutilmente su mensaje y aplace cualquier decisión hasta la reunión del 26 de octubre.
Los expertos creen menos probable que el BCE apueste por seguir ganando tiempo y mantenga su idea de pronunciarse acerca del QE en otoño, sin comprometerse a una fecha concreta.